No debemos acostumbrarnos a la violencia
De nuevo masacres en plena luz de día y en lugares concurridos, decenas de ejecutados en varios municipios del estado, alertas para no viajar a la entidad y decenas de “células mixtas” recorriendo las calles pareciera ser ya parte de nuestra cotidianidad, a lo que nos estamos acostumbrando, pero simplemente esto no puede ser.
Es cierto, tenemos más de una década en que Chihuahua no sale de los primeros lugares de violencia en el país, y aunque desde las esferas oficiales, tanto federales como estatales y hasta municipales le atribuyan todo al crimen organizado es necesario replantearnos como sociedad qué se está haciendo mal.
Ya son muchos años en que la nota roja, la violencia en su máxima expresión recorre los medios de comunicación y ahora hasta las redes sociales como algo natural, algo a lo que nos estamos acostumbrando y tal pareciera que la capacidad de asombro poco a poco se está perdiendo.
El último acontecimiento ocurrido el pasado jueves 16 donde se registró un ataque armado en un restaurante familiar de Ciudad Juárez, y que dejó cuatro muertos, nos regresa a los días de incertidumbre en la frontera cuando se auto impuso un toque de queda, y que dejó no únicamente miles de muertos, sino también una sociedad herida.
Como si fuera algo normal, hombres armados llegaron al restaurante de comida rápida cuando se encontraba completamente lleno, dispararon y escaparon, dejando cuatro personas muertas, dos hombres y dos mujeres, así el nivel de impunidad y desprecio a pesar de que había cámaras de vigilancia, que por cierto el video corrió entre el morbo y la impunidad tanto en medios de comunicación como en redes sociales.
Este hecho provocó que las autoridades estatales y municipales encabezadas por la gobernadora Maru Campos se reunieran de manera urgente en Ciudad Juárez, ojalá en los próximos días informen cómo combatirán esta escalada de violencia, o mucho mejor, pongan en acción estrategias pertinentes para acabar con este flagelo.
Las escenas se repiten en todos lados: en Cuauhtémoc los cuerpos de tres hombres sin vida por heridas producidas por armas de fuego y a golpes fueron localizados la madrugada del mismo jueves sobre la carretera a Cuauhtémoc. hallazgo que se registra horas después de hechos violentos en los que un lote de venta de autos usados fue incendiado de manera intencional, además de la privación de la libertad de tres hombres.
Los cuerpos de tres jóvenes que se suman a la ola de violencia en esta región con asesinatos, “levantones”, extorsiones e incendios a negocios, misma que inició desde el domingo pasado con el homicidio de siete personas, entre las que se encuentran un niño de 10 años y un adolescente de 17.
Ante esta ola de violencia, de nueva cuenta la Oficina de Asuntos Consulares del Departamento de Estado, de Estados Unidos, activó una alerta a los turistas norteamericanos, la razón que se señala es el aumento en crímenes como secuestro y homicidio, se les exhorta a evitar viajar a cinco estados de México, además reconsiderar y/o extremar precauciones al viajar a 25 entidades incluido Chihuahua.
Es preocupante, o al menos debiera preocupar a nuestras autoridades esta alerta que dice textualmente: “Los delitos violentos, como el homicidio, secuestro, carjacking y robo, están generalizados y son comunes en México. El gobierno de los Estados Unidos tiene una capacidad limitada para proporcionar servicios de emergencia a los ciudadanos estadounidenses en muchas áreas de México, ya que los viajes de los empleados del gobierno de los Estados Unidos a ciertas áreas están prohibidos o restringidos. En muchos estados, los servicios de emergencia locales están limitados fuera de la capital del estado o de las principales ciudades”.
Así es como nos ven desde el exterior, y aún así la titular de Seguridad y Protección Ciudadana Rosa Icela Rodríguez asegura que la estrategia del Gobierno de la República ha empezado a incidir en los índices delictivos y en las estadísticas de violencia criminal, de nueva cuenta, ellos cuentan con otros datos.
Mientras la autoridad no entienda que en el México real hay otros datos, que en las calles se siguen disputando los espacios para la venta de droga, no habrá forma de frenar esta escalda de violencia, datos que la funcionaria y todas las instancias federales, hasta las instancias políticas tratan de ignorar.
En la historia reciente de nuestro estado, la violencia ha sido una mancha indeleble que no han podido acabar los gobiernos, y aunque se pudiera entender que la impunidad y desdén desde las esferas de gobierno provoquen que este problema no termine, lo cierto es que como sociedad aún tenemos mucho que hacer.
Y sin duda lo principal es que no debemos perder la capacidad de asombro, y claro exigir a nuestras autoridades, sean de color que sean, nos brinden seguridad en una sociedad compleja y violentada.