‘NO PEGARÁ AQUÍ TRASLADO De CARGA AL FELIPE ÁNGELES’
Líderes empresariales indicaron que con esta decisión, la autoridad federal busca generar una demanda artificial y no deja que el movimiento de mercancías se lleve a cabo en función de las necesidades propias de la logística del tráfico de bienes de las compañías
La decisión del gobierno federal de imponer por Decreto a las empresas, que sus volúmenes de carga vayan al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles y dejen de hacerlo en el de la Ciudad de México, no tendría un mayor impacto en las empresas de Chihuahua, dado que el mayor tráfico es hacia los Estados Unidos y no al centro y sur del país.
Salvador Carrejo y Román Rivas, presidentes de Coparmex e Index-chihuahua, respectivamente, señalaron ayer lo anterior y plantearon que, con esta decisión, la autoridad federal busca generar una demanda artificial y no deja que el movimiento de mercancías se lleve a cabo en función de las necesidades propias de la logística del tráfico de bienes de las compañías, así como de empresas que prestan ese servicio.
Carrejo Orozco apuntó que, en un país normal, esa es la lógica de operación de los negocios y de políticas públicas, en función de demanda real y de ahorrar costos y tiempos.
“Lamentablemente, esas decisiones no obedecen a eso, sino lo que hace el presidente, es ante el fracaso del aeropuerto”, enfatizó.
En tanto, el presidente de Índex-chihuahua, Román Rivas Hong dijo que por lo que hace al sector manufacturero, la mayoría de los embarques de Estados Unidos y otros países, llegan a través de la frontera norte. Llegan en vuelos a El Paso, Texas y se cruzan por carretera hacia la ciudad capital.
Abundó que lo que proviene de Asía, llega a Los Ángeles, California y de ahí se y traslada hasta la frontera en tren o en avión, dependiendo de qué tanto sea la urgencia.
Realmente se trabaja con la logística regional y la gran parte utiliza la frontera a través de los puentes que comunican de manera fiscal y los recintos ya fiscalizados.
Apuntó que sí se tiene proveedores de maquinaria y equipo que se compra en Europa y tiene representaciones en Querétaro y la Ciudad de México, y que probablemente sí tendrían un impacto al traer alguna refacción y utilizar el aeropuerto Felipe Ángeles, porque implica más logística, pero como tiene muchos subsidios y no se paga el TUA, el juicio es que debería bajar el precio de la refacción en lugar de subir.