Rondan casi los 30 MIL DECESOS
A cinco días de la tragedia, continúan las labores en búsqueda de personas con vida
Tras el sismo de 7.8 grados que dejó a más de millones sin hogar, los socorristas aún estaban rescatando a sobrevivientes de entre las ruinas
Latakia, Turquía–
Ibrahim Zakaria perdió la noción del tiempo y a veces quedó inconsciente durante los casi cinco días que estuvo atrapado entre los escombros de su casa tras un terremoto de gran magnitud que azotó Turquía y Siria esta semana.
El trabajador de una tienda de celulares de 23 años del pueblo sirio de Jableh sobrevivió con gotas de agua sucia y a la larga perdió la esperanza de ser rescatado.
“Dije: estoy muerto y será imposible que vuelva a vivir”, dijo Zakaria, que fue rescatado el viernes en la noche, a The Associated Press ayer desde una cama en un hospital de la ciudad costera de Latakia, en donde su madre de 60 años, Duha Nurallah, también se recupera.
Cinco días después de que dos poderosos sismos con unas horas de diferencia provocaran que miles de edificios se derrumbaran, dejando más de 28,000 muertos y a millones sin hogar, los socorristas aún estaban extrayendo a sobrevivientes de entre las ruinas, uno de ellos de apenas 7 meses.
Aunque cada rescate provocaba abrazos y gritos de “¡Allahu akbar!” —“¡Dios es grande!”— de los agotados hombres y mujeres que trabajaban sin parar bajo temperaturas gélidas para salvar vidas, eran la excepción en una región cubierta por el dolor, la desesperación y creciente frustración.
Más de una docena de sobrevivientes fueron rescatados el sábado, incluida una familia en Kahramanmaras, la ciudad turca más cercana al epicentro del terremoto del lunes. Los socorristas llevaron a lugar seguro a Nehir Naz Narli, de 12 años, antes de regresar por sus padres.