Dará ONU mil mdd para ayuda humanitaria
Permitirá apoyar a los damnificados
Washintgon– Las Naciones Unidas lanzaron ayer un llamamiento por valor de mil millones de dólares para ayudar a más de cinco millones de personas afectadas por los catastróficos terremotos de la semana pasada, los mayores que han sacudido el país en un siglo.
La financiación, que cubre un periodo de tres meses, permitirá a las organizaciones de ayuda aumentar rápidamente sus operaciones para apoyar los esfuerzos de respuesta dirigidos por el Gobierno en áreas que incluyen la seguridad alimentaria, la protección, la educación, el agua y el refugio.
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, instó a la comunidad internacional a dar un paso adelante y financiar íntegramente el esfuerzo de respuesta.
"Turquía acoge al mayor número de refugiados del mundo y ha mostrado una enorme generosidad con sus vecinos sirios durante años", afirmó. "Ahora es el momento de que el mundo apoye al pueblo turco, al igual que ellos se han solidarizado con otros en busca de ayuda".
Conmoción y devastación
El coordinador de Asuntos Humanitarios y Ayuda de Emergencia de la ONU, Martin Griffiths, también pidió a los países que apoyaran el llamamiento. "El pueblo de Turquía ha experimentado una angustia indescriptible", declaró Griffiths, que visitó el país la semana pasada.
"Conocí a familias que compartieron sus historias de conmoción y devastación. Debemos estar con ellos en su hora más oscura y asegurarnos
de que reciben el apoyo que necesitan", añadió.
Una catástrofe única
La ONU y sus socios se han apresurado a ayudar a Turquía y a la vecina Siria tras los devastadores terremotos del 6 de febrero.
Sólo en Turquía, más de nueve millones de personas se han visto directamente afectadas por esta catástrofe sin precedentes, que ha causado 35 mil muertos, según las últimas cifras facilitadas por el Gobierno.
Los seísmos se produjeron en
pleno invierno, dejando a cientos de miles de personas, incluidos niños pequeños y ancianos- sin acceso a refugio, alimentos, agua, calefactores y atención médica en temperaturas bajo cero.
Unos 47 mil edificios han quedado destruidos o dañados, entre ellos escuelas, hospitales y otros servicios esenciales y miles de personas han buscado refugio en albergues provisionales por todo el país. Muchas familias han quedado separadas y cientos de niños han quedado huérfanos o no han podido reunirse con sus padres.