La obra pública es más que cemento y varilla: MC
Rinde Maru Campos su primer informe de gobierno, acompañada por personalidades nacionales y estatales. Como suele suceder en el evento político más importante del estado, esta ocasión no fue la excepción para que se reuniera la clase política, académica, empresarial, deportiva, de la farándula y del periodismo.
La gobernadora desmenuzó genéricamente los resultados de su primer año de ejercicio. Ya lo había entregado detalladamente ante el Pleno del Congreso del estado, como lo marca la Ley, y de manea personal.
Por espacio de 2 horas con quince minutos, María Eugenia Campos Galván, enumeró datos y cifras de los principales rubros de su administración.
El Centro de Convenciones de la avenida Tecnológico fue el escenario que albergó a más de dos mil asistentes, los cuales se dieron cita para escuchar la exposición de la mandataria en materia social, educación, desarrollo humano, turismo, seguridad, infraestructura e inversión pública.
El evento fue atestiguado por cinco gobernadores, senadores de la república, diputados federales, locales, alcaldes, la plana mayor del PAN, y por el secretario de gobernación, Adán Augusto López Hernández, en representación del presidente de México.
Destacó la presencia del expresidente Vicente Fox Quesada, el más aplaudido de la mañana, después de la intervención de Campos Galván.
Las ausencias también se notan, tal fue el caso del expresidente Felipe Calderón Hinojosa, que enfrenta en estos días el escrutinio más fuerte de su trayectoria política.
El evento, el escenario y las circunstancias darán de que hablar toda la semana, porque es sabido que la gobernadora figura en el ánimo de la dirigencia de su partido y de la clase política, como una aspirante a la candidatura a la presidencia de la república.
De la confirmación de los datos y cifras expuestos durante el informe no oficial, se encargarán los diputados locales que desglosarán y verificarán con lupa cada rubro, cada peso ejercido, y que se haya hecho dentro del marco de la ley.
Por otro lado, es innegable que en el debate a ras de suelo estarán presente las comparaciones -necesarias-, y son sanas cuando se cuenta con elementos e información, para que sea de altura y de nivel. Vaya, con objetividad y elegancia.
Tampoco faltarán los señalamientos -clásicosque salen de las tripas; esos que surgen por impulso, o simplemente para resaltar el fierro de la herradura, aunque se vean fuera de lugar y ridículos.
Hay que decirlo también, en estos tiempos son menos frecuentes las grandes obras de infraestructura porque simple y llanamente el presupuesto está tan comprometido en pagar voluptuosas deudas heredadas, que apenas si alcanza para lo elemental.
Lo de ahora es mantener a flote lo que se hizo antes con dinero prestado a largo plazo, claro está. Con lo poco que hay, invertirlo en la obra que no se nota, pero que se siente.
Cierto, apenas es el primer año, por lo que se antoja difícil adelantar que esta administración va por el camino correcto. Lo que sí, es que el ciudadano está trucho a lo que sucede y esperanzado a que, ahora sí, se recupere el rumbo y haya espacio para la reconciliación sociedad-gobierno.
En conclusión:
-Es muy temprano para echar las campanas al vuelo.
-El voto en las urnas tiene eco en la confianza de los sectores sociales y productivos en el gobierno del estado.
-Al voto de revalidación ciudadana le falta forja, pero hay tiempo de aquí a junio del 2024.
Es cuanto.