CASITAS MARAIKA
Está enclavado en la Sierra Madre Occidental, donde la montaña y el Océano Pacífico se encuentran, por lo que la naturaleza marina convive con la de la selva tropical. Para llegar desde Puerto Vallarta a esta maravillosa locación, lo debes hacer en lancha. El punto de partida está en el muelle de Boca de Tomatlán, donde por una tarifa de 50 pesos (por persona), una lancha te traslada hasta la hermosa playa donde se encuentra Casitas Maraika. En esta porción de selva protegida, tienes la oportunidad de escuchar en coro a parvadas de pericos, ver (muy de cerca) a los pelícanos cazar y la posibilidad de contemplar a grupos de delfines surcando la zona. Todo esto mientras disfrutas de una bebida helada preparada a base de frutas naturales y diversos platillos de la gastronomía mexicana e internacional. Este lugar cuenta con una gran variedad de actividades que alimentarán tu espíritu de todas las formas posibles: desde caminatas guiadas por la selva y actividades acuáticas, hasta masajes terapéuticos, clases particulares de yoga, fiestas en la playa y sesiones de música en vivo. Una de las cosas que sorprende a todo el que visita este lugar es la armonía que el proyecto ha desarrollado con la naturaleza circundante, respetando a los animales y flores, e invitando a sus huéspedes a respetar el entorno.