El Economista (México) - Autos
PORSCHE 911 GT3 RS
Capaz de rodar en cualquier ciudad como un “civil” más, el 911 GT3 RS lucha en su interior para dar rienda suelta a su vocación velocista y correr en un circuito
Se trata de músculo puro sin la presencia de anabólicos pasajeros, como podría ser un turbocompresor.
No te preocupes, me pasa lo mismo. Llega un punto en el que parece que te volverás loco con tantas denominaciones. Mi consejo: identifica a cada uno por un color en particular. De esta forma te será más fácil saber cuál es cuál o al menos así ocurrirá con el nuevo Porsche 911 GT3 RS que fue anunciado hace apenas unos días. La razón de su adelanto, a pesar de que será uno de los atractivos del Salón de Ginebra, es que los directivos de Stuttgart quieren evitar que les suceda lo que a Peugeot con su 508 y las imágenes filtradas, lo que les tiró a la basura la gran presentación que seguramente tenían entre manos.
VISTOSO Y FUNCIONAL
El nuevo 911 GT3 RS es primero de la exclusiva familia RS en actualizarse. Para llamar más la atención desde casa, le confeccionaron un traje a la medida con una exclusiva combinación de “telas”, pues su impactante imagen es como un traje en el que conviven la seda y el más costoso de los casimires. El tono te arrebata la mirada porque el verde contrasta con el negro que fue empleado en varios elementos de la carrocería necesarios para conducir de mejor forma el flujo de aire.
Porsche justificó la imagen radical por su vocación deportiva, pues sin problema podría ser considerado para participar en algún campeonato de GTs. La aerodinámica obligó a ensanchar la carrocería, sumar faldones laterales, un spliter, así como un difusor trasero. Aunque ninguno de ellos tiene el peso e importancia del enorme alerón rígido colocado sobre la tapa del motor.
Los rines siempre son un tema de discusión porque determinan el diseño que mejor le va a cada modelo termina en una larga discusión. Para el caso del GT3 RS parece que esto no sucederá porque así como otros modelos Porsche utilizan rines monotuerca (de los que no hay muchas opciones en el aftermarket) también su imagen es perfecta para el estilo racing del auto. En el eje delantero monta rines de 20”con neumáticos deportivos de medidas 265/35, características específicas para mejorar la agilidad y la precisión de la dirección. En la parte trasera los neumáticos deben cumplir con las exigencias de poner en el pavimento el poder de tracción que genera el bóxer, por eso recurre a rines de 21” que calzan neumáticos 325/30.
A LA PISTA, SI QUIERES
El motor atmosférico de seis cilindros y cuatro litros preparado cuidadosamente por Porsche obtiene más potencia y mejores prestaciones comparado con el que impulsaba al anterior 911 GT3 que ya de por sí era radical.
El departamento de competición dispone del equipamiento necesario para que tu RS3 salga del distribuidor y lo lleves directo al autódromo. Por ello dispondrá como opción de los paquetes Clubsport y Weissach. El primero está compuesto por barras antivuelco o jaula de seguridad, extintor manual, instalación eléctrica para colocar el botón que desactiva a la batería para evitar un peligroso corto o chispazo, así como cinturones de seis puntos. Por su parte, el Weissach va más allá y sacrifica el confort para hacer que la báscula marque menos peso; está compuesto por piezas de carbono adicionales para el chasís, el interior y el exterior, así como con unos rines de magnesio opcionales. En su configuración más ligera, el paquete Weissach reduce el peso del 911 GT3 RS hasta los 1,430 kilos.
EJEMPLO DE DESEMPEÑO
La mejor parte está escondida en el eje trasero gracias a su capacidad de giro. Aunque el hecho de saber que Porsche tiene modelos más potentes a partir de un motor bóxer podría restarle protagonismo al que equipa el RS3. 520 caballos son una cifra sorprendente, aunque no olvidemos que el GT2 RS se lleva las palmas con sus 700 caballos de potencia. En el caso del que te muestro en estas páginas, es pertinente señalar que tiene una capacidad de cuatro litros de aspiración atmosférica. Porsche asegura que el velocímetro llega a 312 km/h mientras que el stint del 0–100 km/h en apenas 3.3 segundos.