ALERTA AMARILLA

Los esquemas de seguridad para fortalecer al sector financiero contra ataques cibernéticos adquieren cada día mayor relevancia; apenas en mayo estábamos hablando de la afectación que sufrieron cinco instituciones, por un monto de más de 300 millones de pesos y que llevó a la creación de un Grupo de Respuesta Inmediata, y ahora, hace una semana, una plataforma especializada en las transacciones de criptomonedas, como son bitcoin o Ethereum, reportó un intento de hackeo.

De acuerdo con un comunicado enviado a sus clientes, Bitso reconoció que al detectarse el ataque cibernético se activaron los protocolos de seguridad e informaron de inmediato a Banxico y otras instituciones, por lo que ninguno de sus clientes sufrió daños, aunque desactivaron el acceso a la plataforma y sus fondos.

Este otro intento de asalto cibernético deja en claro que no se puede minimizar el tema, ni bajar la guardia. En este último caso, la comunicación entre las instituciones financieras fue clave para impedir un problema mayor pero también es necesario que de manera particular cada entidad revise sus protocolos internos, refuerce sus esquemas de alerta para detectar cualquier irregularidad y aumente sus controles de seguridad. La tarea es retadora pero urgente para tratar de manera eficaz y constante.