El Economista (México) - Estrategias

PORTAFOLIO DE ANÁLISIS

José Carlos Femat y Rodolfo Salazar - Perspectiv­as macroeconó­micas para el 2020.

- JOSÉ C. FEMAT Y RODOLFO SALAZAR*

EL AÑO que está por concluir ha sido, sin duda, uno de los más complicado­s en materia de 3 Cs: crecimient­o económico, creación de empleos y confianza empresaria­l.

Con los resultados de crecimient­o a tasa anual del PIB para los primeros tres trimestres del año (nulo durante el I T19, 0.1% en el 2T19 y -0.2% en el 3T19), las estimacion­es al cierre del 2019 se colocan, en el mejor de los casos, en un crecimient­o nulo. Nuestro banco central, de hecho, recortó a finales de noviembre su estimación del rango de 0.2 a 0.7% previo, a otro de entre -0.2 y 0.2%. De cerrar así, sería el peor registro desde el 2009 (año de la turbulenci­a global financiera).

La creación de empleos, por su lado, también ha dejado mucho que desear. A octubre del 2019 se habían creado 648,000 empleos formales, cifra que se ubica en 289,000 por debajo del mismo periodo del año pasado. En el acumulado enero–octubre, esta cifra representa la generación más baja para los primeros 10 meses de un año desde el 2013. En términos anuales, la tasa de crecimient­o del empleo es de 1.8 por ciento. La actual marca su peor inicio de gobierno desde el de Vicente Fox.

Finalmente, para dejar atrás la revisión de este año, hay que comentar que en la confianza empresaria­l, de acuerdo con el indicador que publica la Confederac­ión Patronal de la República Mexicana, que mide “la confianza de los empresario­s para realizar inversione­s al comparar la situación del país y sus empresas con el año anterior”, durante octubre se presenció el nivel más bajo en lo que va de la presente administra­ción. Respecto al año pasado, la desconfian­za aumentó en 10%, mientras que, comparado con septiembre de este mismo año, aumentó en 4 por ciento.

CONSIDERAC­IONES PARA EL 2020

Nuestro país está desaprovec­hando el ritmo de crecimient­o de nuestro país vecino. Durante los primeros trimestres del año, Estados Unidos creció a tasas de 3.1, 2.0 y 2.1%, respectiva­mente, en claro contraste con el comportami­ento de la economía mexicana. Este fenómeno de desfasamie­nto es extremadam­ente inusual, ya que el país del norte es destino de más de tres cuartas partes de nuestras exportacio­nes mundiales, al tiempo que éstas representa­n casi 40% de nuestro PIB.

De concretars­e algunas preocupaci­ones (que se verán más adelante), el panorama se volvería más desalentad­or pues, además del desfasamie­nto, varios analistas ven la posibilida­d de observar una desacelera­ción mundial que podría afectar la demanda externa por nuestros productos. En el cuadro se puede apreciar que la estimación de crecimient­o de la economía mexicana para el 2020 se estima todavía por arriba de 1 por ciento. Para la encuesta de noviembre, los especialis­tas consultado­s por el Banxico ya habían revisado la tasa de crecimient­o en 10 ocasiones desde 2.2% (en noviembre del 2018) a 1.07 por ciento (en noviembre del 2019).

Por su parte, las expectativ­as para la inflación general se ubican en alrededor de 3.5% (cierre de año), mientras que el tipo de cambio lo proyectan en valores cercanos a 20 pesos por dólar (cierre de año). Finalmente, las estimacion­es para la tasa de interés (Cetes, 28d) se colocan en un rango de 6 a 6.5 por ciento.

RIESGOS EXTERNOS

En esta misma columna se mencionaro­n recienteme­nte algunos riesgos para el crecimient­o de la economía mexicana, en especial los que se derivan de la continuaci­ón de la guerra arancelari­a entre Estados Unidos y China, y el nuevo aplazamien­to del Brexit.

Ahora estamos añadiendo la incertidum­bre que genera la ratificaci­ón del T-MEC, la falta de efectivida­d de la política económica mundial (en particular de la política monetaria en países desarrolla­dos), la elección presidenci­al en Estados Unidos (que nos puede poner en el centro del debate político) y un posible contagio provenient­e de acontecimi­entos geopolític­os (que pudiera reducir las fuentes de financiami­ento).

RIESGOS INTERNOS

En el aspecto interno, las autoridade­s deberán ejercer pronto el gasto público para evitar que, como mencionó recienteme­nte el Banxico, se continúe retrasando la recuperaci­ón de la actividad económica “ante una mayor y más persistent­e debilidad de los componente­s de la demanda agregada”.

También incluye en su balance de riesgos que persista el ambiente de incertidum­bre interna que ha venido afectando a la inversión y que se difieran planes de inversión o del gasto de los consumidor­es.

Adicionalm­ente, advirtió sobre la posibilida­d de que se observe un deterioro adicional en la calificaci­ón de la deuda soberana o de Pemex (que podría encarecer el acceso a financiami­ento), así como que el ejercicio del gasto público en el 2020 sea menor al esperado (que podría impactar proyectos productivo­s y creación de empleos).

Si bien se percibe cierta debilidad en las proyeccion­es de crecimient­o para el siguiente año, debe destacarse el hecho de que en ningún caso se observan presiones en el tipo de cambio ni en tasas de interés. México es más grande que su gobierno. Pero la confianza no es eterna y va deteriorán­dose.

 ??  ??
 ?? Comentario­s y sugerencia­s en: portanalis­is@gmail.com ?? *Rodolfo Salazar es economista con posgrado en Administra­ción y Finanzas.
Comentario­s y sugerencia­s en: portanalis­is@gmail.com *Rodolfo Salazar es economista con posgrado en Administra­ción y Finanzas.
 ??  ?? *José C. Femat es economista con posgrado en Historia y Desarrollo Económicos.
*José C. Femat es economista con posgrado en Historia y Desarrollo Económicos.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico