El Economista (México) - Previsión
CUIDADO CON LOS RIESGOS ANTRÓPICOS
TANTO EN HOGARES COMO EN EMPRESAS SE DEBE CONTEMPLAR UN SEGURO DE INCENDIO, LAS CATÁSTROFES PUEDEN CAUSAR PÉRDIDAS HUMANAS Y DESTRUCCIÓN DE BIENES
Frecuentemente, escuchamos que un incendio arrasó una empresa o una casa; sin embargo, en muchas ocasiones no cuentan con una póliza contra incendios, o es parcial y no cubre lo que se requiere para reanudar actividades.
Tal fue el caso del incendio que devastó el edificio de Conjunto Lar, ubicado en la calle de Bolívar número 540 en la colonia Álamos en la Ciudad de México, durante la madrugada del 4 de febrero del presente año.
La empresa se dedica a la venta y distribución de materias primas en las industrias de cuidado personal, cuidado del hogar e industrial desde hace tres décadas. Conjunto Lar cuenta con las líneas de productos incluyen surtido de fragancias, colores, extractos, activos, etcétera, y una gran variedad de productos químicos, que, en cuestión de minutos, fueron devastados en los dos pisos del edificio ubicado en la zona centro de la ciudad.
Empleados de Conjunto Lar mencionaron que la póliza cubría el inmueble, sin embargo, no tenía una protección de los productos principales del negocio: las fragancias, los activos y otros productos químicos, donde la mayoría son de importación y eso causó que la empresa detuviera el boyante crecimiento que mantenía en la última década.
Así como a Conjunto Lar México, le ha sucedido a pequeñas, medianas y grandes empresas que son afectadas por un riesgo catastrófico, que en muchas ocasiones pierden el total de la empresa.
ESPECIALISTAS
Iván Chimbo, especialista en temas de riesgos que radica en Ecuador, explica que los riesgos causados por las actividades humanas se denominan riesgos antrópicos, entre los que se incluyen los incendios forestales provocados, o los accidentes tecnológicos e industriales. “Las catástrofes, debidas a riesgos naturales o antrópicos, pueden causar pérdidas de numerosas vidas humanas y gran destrucción de bienes”.
Óscar Osollo, profesor del Instituto Mexicano Educativo de Seguros y Fianzas A C (IMESFAC) explicó que el concepto de riesgo es “la posible ocurrencia por azar, de un acontecimiento que produce una necesidad económica o bien, es la eventualidad que de ocurrir una catástrofe traerá consecuencias económicas negativas para un individuo, ya sea persona física o moral”.
Osollo considera que el incendio se cataloga como fuego fuera de control, y hay de dos tipos, con flama y sin flama. Con flama es cuando se produce calor, flama, humo y deja los residuos carbonosos y sin flama, produce calor humo y también deja residuos carbonosos, aunque este último tipo de incendio no se ampara en el ramo de incendio.
Óscar Osollo explica que en una póliza de incendio los riesgos cubiertos son: fenómenos naturales, fenómenos sociales y otros rubros catalogados como otros riesgos. “Un seguro de incendio cubre los daños materiales causados por: combustión espontánea y la remoción de escombros”. TIPOS DE COBERTURAS Una cobertura básica de seguro de incendio puede proteger al inmueble y sus contenidos, a través de un siniestro creado por incendio, rayo o explosión. Pero también existen coberturas adicionales que se pueden adquirir de manera individual, como puede ser huelgas y alborotos populares y conmoción civil, extensión de cubierta, derrame de protecciones contra incendios, entre otros.
Lo importante es seleccionar un asesor que le ayude a elegir la protección de su negocio y su patrimonio.