El Economista (México) - Termómetro Económico
Importancia de la soberanía agroalimentaria
(SEGUNDA PARTE)
Como lo expuse en la primera entrega, México ocupa el noveno lugar en superficie agrícola, su nivel tecnológico es menor, así como el tamaño de las unidades de producción respecto a otros países competidores
Para que el sector agropecuario y rural se mantenga y se incremente, es necesario apoyar su capitalización, financiamiento y tecnificación.
La importancia de estos aspectos es que se producen alimentos, materias primas para la industria, genera empleos, divisas, evita la migración de la población y contribuye además a la soberanía alimentaria.
De acuerdo con la caracterización de los productores del sector agropecuario, elaborada por la Sagarpa con el apoyo de FAO y FIRA, atiende prioritariamente e integralmente a los estratos menos desarrollados, pero con potencial productivo, considerando las características y tamaño de las empresas que van desde la micro, la empresa familiar, pymes y grandes empresas.
FIRA impulsa la organización e integración de las mismas para lograr una mayor competitividad, prioriza su apoyo a los pequeños y medianos productores y se vale de diversos instrumentos entre los que se destacan: formación y consolidación de una red de intermediarios financieros para atender con el servicio de fondeo y garantía a empresas de diferentes tamaños, apoyos de acompañamiento al crédito con recursos propios y de otras instituciones nacionales e internacionales como Sagarpa, Firco, Inaes, Conavi, Fonhapo, Secretaría de Economía, Fundación Francesa y BID, entre otras, que dan soporte y viabilidad a los proyectos de financiamiento.
Hay varios ejemplos a nivel nacional que muestran cómo FIRA ha impulsado la organización de productores para la consolidación de compras en común de insumos, maquinaria, equipo y servicios, permitiendo abatir sus costos de producción. Entre otras estrategias, también ha logrado incrementar la producción por unidad productiva a través de la asesoría técnica, la capacitación y consultoría, sin importar el tamaño de las empresas, lo que coadyuva para que especialmente las pequeñas empresas productoras de alimentos y materias primas, se conviertan en proveedoras de las grandes.
En algunos casos, las empresas grandes además de comprar el producto a un precio justo, apoyan a sus proveedores para mejorar el proceso productivo aportando y transfiriendo tecnología.
Consulte estudios, estadísticas y material videográfico en la página de FIRA, donde podrá encontrar información sobre los programas de esta institución, y la manera en que las unidades productivas pueden incrementar su productividad y rentabilidad en pos de ir por la soberanía alimentaria, sino también por la necesidad de equilibrar el uso eficiente de los recursos naturales para producir alimento, hasta la rentabilidad de las unidades económicas.