El Economista (México) - Turismo
Una picante experiencia
La planta donde se produce el licor que ha conquistado los paladares internacionales abre sus puertas a los viajeros
PUEBLA, Puebla. La puerta marcada con el número 912 B sobre la Calle 12 Poniente en el centro de la ciudad de Puebla de Zaragoza resguarda, sigilosamente, la receta y el método de elaboración del menjurje de Ancho Reyes, el único licor de chile ancho a nivel mundial que, desde hace cinco años, ha logrado conquistar el paladar de más de 40 países.
Sin embargo, a partir de este mes, la planta abre sus instalaciones a los viajeros para que puedan conocer, de primera mano y en un recorrido gratuito, cómo se elabora este licor que rescata la receta de la familia Reyes, quienes lo producían de manera artesanal en los años 20, utilizando ingredientes locales.
El recorrido por la fábrica tiene una duración de aproximadamente una hora y media y está divido en tres etapas. La primera, en la que se da la bienvenida a los turistas e incluye un repaso por las medidas de seguridad que hay que seguir al interior de la planta.
La segunda —con una duración de aproximadamente 40 minutos— permite a los visitantes conocer, a detalle, el proceso artesanal de la transformación del chile ancho en el menjurje, desde el momento en que llega a la planta la materia prima (chiles poblanos de San Martín Texmelucan, Puebla, que son cosechados a mano y secados al sol), el proceso de corte con tijera, el macerado, mezclado, reposado y embotellado del producto.
La tercera etapa de la experiencia dura 30 minutos y se lleva a cabo en el expendio de Ancho Reyes que se encuentra a un lado de la planta. Aquí se presenta un video sobre el menjurje y un mixólogo explica el tipo de cocteles que se pueden preparar con el licor, además de tener la posibilidad de probar alguna de sus recetas y, por supuesto, adquirir el producto.