El Economista (México) - Uniones
LA TAREA DE BANXICO
Lograr controlar los precios ha sido un dolor de cabeza para las autoridades financieras en México. De acuerdo con los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, el 2018 inició con una inflación en 5.55% (cifra de enero), la más alta para un periodo similar desde el 2009.
A pesar de que se ha moderado su escalada mensual, parece cada vez más lejano que se logre llegar a la meta de 4% que planteó el actual gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, para fin de año, sobre todo si el costo de los energéticos continúan aumentando y los productos de la canasta básica siguen la misma tendencia.
Hablando de la canasta básica, el Inegi informó también que el índice de precios tuvo un incremento mensual de 1.26% en el primer mes del 2018, obteniendo de este modo una variación anual de 6.29%, mientras que en enero del 2017 el alza mensual fue de 4.43% y anual de 7.26 por ciento.
Los bienes y servicios cuyos precios reportaron mayores alzas en el año, como gas LP, gasolina, transporte y algunos productos agropecuarios, son los que tuvieron mayor incidencia en la población.
Sin duda, resultan preocupantes dichos incrementos, pues es bien sabido que principalmente impactará a las familias que menos ingresos tienen, además de que afectará el poder adquisitivo de los mexicanos.
Dura tarea les dejó Agustín Carstens.