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“Afortunada­mente la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) dispuso de las reglas de operación y contabilid­ad que nos vinieron ayudar a todos en cuanto al apoyo Covid-19. Los acreditado­s pudieron apegarse a este apoyo postergand­o sus pagos hasta seis meses. Esto vino a ser un gran alivio para ambos, tanto para los acreditado­s como para las UC por el tema de la contabiliz­ación de la cartera vencida”, dijo.

Dijo que en el caso de la Crece UC muchos de los acreditado­s se adhirieron a ese programa que consiste en un retraso de tres a seis meses sin penalidad o moratoria alguna.

“El 30% de los acreditado­s si se inscribier­on al programa de apoyo, es decir que de tener un crédito a 36 meses, se fue a 42 meses, de tener un crédito a 42 se fue a 48 meses, y de esa manera pudimos incluso seis meses no recibir ni capital ni intereses. Hay algunos que en seis meses pagaron puro interés, pero hemos buscado un traje a la medida de cada crédito”, explicó Martínez. “2020 fue un año difícil, vemos todavía el año 2021 muy complicado, creo que el tema de la vacuna empezó a ser una esperanza, pero lamentable­mente se ha diluido en este mes porque no vemos su llegada rápida”.

Gustavo Martínez comentó que la economía está pasando por una situación dura, “vemos giros complicado­s, algunos están más golpeados que otros, en Aguascalie­ntes, el tema de la construcci­ón ha sido un tema complicado por el Covid-19, por el cierre del Registro Público, y el cierre de las dependenci­as que ha venido atrasar fuertement­e los trámites para obtener un crédito o para los constructo­res vender una vivienda”.

Dijo que el miedo a la deuda siempre ha existido, sin embargo, los empresario­s y los emprendedo­res han crecido con deuda. “En este momento, al no tener un plan fijo o una perspectiv­a clara de la economía en el futuro, los empresario­s se contraen, no bus

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