Elegibles para el PRD
Con sólo dos meses como militante del PRD, Agustín Basave podrá convertirse este fin de semana en el presidente del Comité Ejecutivo Nacional de esa formación izquierdista. Antes, el académico y legislador presentará su ensayo La cuarta socialdemocracia (Libros de la Catarata, 2015), arropado por los intelectuales Denise Dresser, Roger Bartra y Mauricio Merino.
Las aguas democráticas están fuera de su cauce, plantea el politólogo en esa obra, que censura “la subordinación del poder público al dinero y la concomitante corrupción de la partidocracia”. Muchos de sus postulados también están contenidos en la iniciativa de ley que propuso en la Cámara de Diputados, la semana pasada, para frenar el pernicioso fenómeno del voto nulo con una fórmula audaz: a mayor voto en blanco, menor financiamiento para las fuerzas políticas.
Basave parece predestinado a dirigir al PRD, el próximo sábado 7. La reciente reforma al estatuto partidista obligaría a que la secretaría general, en atención a la paridad de género, sea ocupada por una mujer.
Pero la convocatoria publicada en estrados y en la página web del PRD —bajo la rúbrica del presidente del IX Consejo Nacional, Ángel Clemente Ávila Romero— contempla el “nombramiento” e inmediatamente después la toma de protesta de los nuevos dirigentes partidistas.
El pasado martes 3, el CEN perredista aprobó la propuesta de Carlos Navarrete Ruiz para convocar a los 450 integrantes consejeros nacionales a una sesión extraordinaria, con carácter electivo. “Como ocurre en la democracia, quien obtiene la mayoría calificada es elegido”, había resumido el dirigente saliente, quien presumía que los nuevos titulares gozarán de plena legitimidad, pues para acceder al cargo tendrán que obtener 66% de los votos del pleno del consejo. “Muchos dirigentes que tienen ganas de participar (serán) bienvenidos, si cumplen los requisitos”, completó.
Esta unción irremediable inició hace dos meses, con la reforma al estatuto del PRD. La votación para modificar el artículo 256 del estatuto fue de 260 votos a favor, 78 en contra y cinco abstenciones. El respaldo de los congresistas de Nueva Izquierda y ADN permitió eliminar el requisito de una antigüedad de dos años para ocupar un cargo de dirección partidista. Basave hizo su parte y solicitó su afiliación.
Ni siquiera debería preocuparse por estar al corriente en el pago de sus cuotas, pues no obstante de carecer de antecedentes en cargos directivos dentro del partido o membresía en el consejo nacional, detenta un cargo de elección popular y cuenta con el aval de 25% de los consejeros identificados con NI y ADN.
Representantes de otras corrientes perredistas acudieron al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para impugnar esa reforma. Los magistrados de la Sala Su- perior desecharon las impugnaciones, pero el estatuto no entraría en vigor, hasta que el consejo general del INE validara la procedencia constitucional y legal de la reforma a los documentos básicos del PRD. Esto último se materializó el pasado martes 3, con la publicación en el Diario Oficial de la Federación de la resolución de la autoridad electoral.
El nuevo estatuto previó esta dilación: su tercero transitorio dispone que una vez declarada la constitucionalidad de las reformas aprobadas por esta soberanía, el Consejo Nacional inmediatamente convocará a elegir al presidente y al secretario general sustitutos.
Por mandato judicial también quedó descartada la petición de la dirigencia del PRD de Durango, que buscaba dejar sin efectos la reforma estatutaria hasta que concluyeran los procesos electorales del 2016. Y es que la reforma al artículo 307 dejó en manos del CEN formular la estrategia electoral y la política de alianzas; en dado caso, los consejos estatales podrán proponer al CEN la política de alianzas para que éste lo rechace o lo acepte.
¿Elección o nombramiento? El próximo sábado 7, el Consejo Nacional podría recibir otros registros. El senador Armando Ríos Piter ya cesó en sus aspiraciones, pero hay otros interesados, como el ex diputado federal Fernando Belaunzarán, que podrían dar la sorpresa. En las próximas 72 horas, los dirigentes salientes buscarán desactivar a cualquier espontáneo que trate de sabotear la unción de Basave.
¿REMEDIO? Poco a poco, pero sin pausa, los cercanos a David López han abandonado las oficinas de comunicación social de las principales dependencias de la administración pública federal. La exclusión más reciente ocurrió a finales del mes pasado en el IMSS, donde José Luis Alcudia tuvo que entregar su despacho a Érika Contreras Licea, quien tras cumplir con un año sabático en el servicio público —se mudó a Melbourne para completar una maestría— regresó a las tareas comunicacionales, en las que incursionó cuando su entonces jefe, Ernesto Cordero Arroyo, la nombró vocera de la SHCP. El currículum de esta politóloga contiene elementos que apuntan a una historia mayor: la triada que además del legislador panista complementa los Pepetoños González Anaya y Meade Kuribreña. A ese grupo también pertenece la ex vocera calderonista, Alejandra Sota.
RETORNO. Un año después de que expirara su mandato como ombudsman, el abogado tijuanense Raúl Plascencia Villanueva vuelve a la escena pública. La semana pasada sustentó una conferencia magistral en la Universidad Autónoma de Querétaro, en su calidad de presidente del Instituto Iberoamericano de Justicia y esta tarde presentará una conferencia sobre la prueba ilícita, en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.