Llama a la reconciliación y a dejar atrás la lucha electoral
Aseguró que su llamado no es un cheque en blanco y que se actuará contra quienes hayan cometido irregularidades
Colima, Col. EL HECHO de hacer un llamado a cerrar heridas, después del proceso electoral extraordinario celebrado el pasado 17 de enero, no se debe de entender como cheque en blanco para quienes tengan responsabilidades tanto electorales como administrativas.
Esto advirtió en entrevista para El Economista el candidato priista José Ignacio Peralta Sánchez, quien se levantó con la victoria en la reposición de los comicios.
Dijo que agradecía a los actores y partidos políticos que respaldaron su proyectos: “Ellos están creyendo en Ignacio Peralta, por lo tanto yo tengo que cumplir esas expectativas dando resultados muy concretos y, en tercer lugar, haciendo un llamado a toda la sociedad”.
Precisó que va a gobernar para todos los colimenses: “Para los que votaron por mí y los que no votaron por mí; por lo tanto, (es preciso) hacer un llamado para que generemos una gran unidad de toda la familia colimense; me parece que la unidad es el ingrediente que se vuelve necesario para construir sobre esa base el trabajo que hay que hacer los próximos seis años”.
Reconoció que el proceso extraordinario fue difícil en algunos momentos e invitó a una reconciliación: “Yo lo que quiero es que (en) las tertulias, las comidas familiares, las mesas en los cafés, donde se reúnen los colimenses, ya no hablen de temas que tengan que ver con la lucha electoral y diferencias de carácter partidista.
“(...) Que hablemos de los problemas que tiene Colima y de cómo los vamos a resolver; que no veamos hacia atrás, que sólo veamos hacia adelante, que no andemos arrastrando lastres”. Mira, hay dos comentarios que haría: el primero es que lo que vimos en las urnas es, desde mi punto de vista, parte de un mensaje que manda la sociedad, en el sentido de que quieren ver campañas limpias, de propuestas y de compromisos, que es la campaña que hicimos con la coalición que yo represento.
Si bien es cierto que tuvimos que defendernos de señalamientos falsos y dolosos que hacían en nuestra contra, lo hacíamos de manera reactiva, pero nunca iniciamos nosotros ataques de guerra sucia.
Segundo lugar: es importante también que quede claro que no puede ni debe haber impunidad si alguien en el proceso electoral cometió alguna situación irregular que viola la ley y que deba de ser no solamente observada sino sancionada; bueno, eso será un procedimiento que continuará en las instancias judiciales.
La reconciliación no implica un cheque en blanco que le dé impunidad a quienes cometieron alguna violación a la ley. Tengo un enorme compromiso con la honestidad y la transparencia; a lo largo de mi vida, en general, he sido un hombre honesto, llevo tres campañas y media, y nadie me ha venido a señalar un acto de corrupcióny por lo tanto, siendo un hombre honesto, haré un gobierno honesto.
Lucharé contra la corrupción. Y esto no solamente implica revisar bien las cuentas de mi administración, sino también administrar bien las cuentas de la administración pasada, que concluyó el 31 de octubre; quienes hayan cometido irregularidades que se de- tecten y que se demuestren serán presentados ante la justicia.
Sin importar el cargo, sea quien sea, aquí no es cuestión de que vayamos a discriminar en función a quién es el que cometió la irregularidad, sino el que haya cometido la irregularidad tiene que pagar las consecuencias que la propia ley establece.
Peralta Sánchez, sobre su relación con el Congreso local de mayoría panista, adelantó que buscará la construcción de consensos: “Que vayan dirigidos a atender el interés supremo de Colima y de los colimenses; si con los presidentes municipales de oposición, así como con los diputados en el Congreso del estado de oposición, dejamos siempre subordinados los intereses generales y partidistas por debajo de los intereses supremos del pueblo de Colima, no tengo duda de que vamos a lograr los acuerdos en beneficio de la gente”.
Dijo que confiaba en que la respuesta de la clase política colimense de oposición sería positiva, “porque todos estamos bajo el escrutinio público y bajo la lupa de la población; es el electorado el que tiene que evaluar nuestras respuestas y reacciones y que, sobre todo, evalúen qué partido está realmente trabajando de forma genuina por generar un bienestar para Colima.
“Confío en que subordinemos los intereses partidistas y que los dejemos por abajo de los intereses supremos del pueblo de Colima, y que esa tónica sea la que nos permita llegar a los acuerdos”.
Peralta Sánchez se convertirá en el gobernador 74 de la entidad, una vez que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación califique cómo válida la elección extraordinaria del 17 de enero.