En febrero, el equipo para el proyecto de Constitución
Política de la Ciudad de México, se elegirá el primer domingo de junio próximo y se instalará de manera formal el 15 de septiembre.
El Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal se denominará Poder Judicial de la Ciudad de México.
El Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Distrito Federal será Tribunal de Justicia Administrativa de la Ciudad de México. Rolando Ramos EL ECONOMISTA
LA COMISIÓN Permanente del Congreso de la Unión declaró ayer la validez constitucional de las reformas a la Carta Magna en relación con la reforma política del Distrito Federal, luego de que 23 congresos locales aprobaron los cambios realizados por las cámaras de Diputados y de Senadores.
Tras hacer de la declaratoria de constitucionalidad, referida en su calidad de presidente del Congreso mexicano, Jesús Zambrano Grijalva (PRD) afirmó que con el renacimiento de la Ciudad de México sus órganos Ejecutivo, Legislativo y Judicial se fortalecerán como poderes locales en su autonomía, y las demarcaciones pasarán de gobiernos unipersonales a alcaldías que trabajarán de forma colegiada.
“La LXIII Legislatura ha tomado una decisión histórica, que ubica a la Ciudad de México a la par de los estados de la República; que apunta a la renovación del pacto federal y que define las funciones de la ciudad capital sin limitar las prerrogativas de sus habitantes’’, precisó.
Los cambios realizados a 54 artículos de la Constitución consistieron fundamentalmente en cambiar la referencia que se hacía al Distrito Federal, por la de Ciudad de México, lo que no significa que dicha extensión territorial se convertirá en un estado de la República, sino en la “entidad federativa’’ número 32.
En cuanto entren en vigor la reforma constitucional en materia de la reforma política del Distrito Federal, cuyo decreto se envió ayer mismo al Ejecutivo federal para su publicación en el
lo que sucederá al día siguiente de su promulgación es que las actuales 16 delegaciones políticas del Distrito Federal tendrán el carácter jurídico de “demarcaciones territoriales de la Ciudad de México’’.
Aunque dichas demarcaciones tendrán el carácter de alcaldías y serán integradas por un alcalde y 10 concejales, no serán consideradas constitucionalmente como municipios.
“No más delegaciones políticas, ahora la noción de alcaldes y concejos elegibles, con toda la fuerza del cabildo, revolucionará la forma de gobernar las demarcaciones territoriales, con autonomía presupuestal, pero con límites de ordenamiento que a nadie razonablemente demócrata deberían disgustar’’, estableció desde la tribuna Alejandro González Murillo, coordinador de la diputación federal del PES.
La Ciudad de México tendrá su propia Constitución política, misma que deberá aprobarse a más tardar el 31 de enero del 2017, por la Asamblea Constituyente, que se integrará por 100 “diputados constituyentes’’, 60 electos de entre los ciudadanos capitalinos y 40 designados; de éstos últimos, 14 serán diputados federales y 14 senadores en funciones, seis representarán al presidente de la República y los seis restantes al jefe de Gobierno del Distrito Federal.
Y seguirá siendo la sede de los poderes de la Unión y capital de los Estados Unidos Mexicanos; sólo en caso de que los poderes se trasladen a otro lugar, establece la enmienda constitucional, la Ciudad de México “se erigirá en un estado de la Unión’’.
A nombre del PRI, el senador Enrique Burgos García dijo que los cambios son un punto de partida, porque apenas habrán de generarse toda una serie de instituciones para impulsar las mejores condiciones de convivencia cotidiana.
La senadora panista Mariana Gómez del Campo afirmó que la reforma es un avance, pero que se quedó muy corta.
rramos@eleconomista.com.mx EL FEDERALISMO ha saldado una cuenta con la ciudad de México de casi 200 años, enfatizó Miguel Ángel Mancera ayer, después de que la Comisión Permanente del Congreso de la Unión emitiera la declaratoria de constitucionalidad de la reforma política del Distrito Federal. “¡Adiós Distrito Federal y bienvenida ciudad de México!”.
En conferencia de prensa, el jefe de Gobierno recordó que desde 1985 “no se había tenido una reforma para la capital de tal trascendencia” y adelantó que, en la primera semana de febrero, presentará al equipo de trabajo que hará el proyecto de Constitución para la ciudad, que será integrado por “10 o 12 personas, quienes emitirán las convocatorias para la agenda temática, que garantice el avance liberal, que debe quedar plasmado en la primera Constitución”.
Agregó que la parte dogmática ya quedó atrás y ahora “hay que esperar los tiempos, como es que el Ejecutivo federal firme el decreto y sea publicado en el Diario Oficial de la Federación y a partir de ahí iniciar los trabajos para integrar a los 100 notables que integrarán el Constituyente, debido a que ellos serán fundadores de la nueva ciudad de México”.
Recordó que el Ejecutivo Federal, Ejecutivo Local, las Cámaras de Diputados y Senadores, además del INE, fijarán el camino hasta llegar al 5 de febrero del 2017, donde estaría concluido el nacimiento, no de un Estado 32, porque seguirá siendo Ciudad capital, pero los beneficios serán elocuentes como “más dinero y cualquier programa que aplique en los Estados, igual será para la capital’’.
Recordó que los 100 notables no percibirán ningún recurso, se buscará a individuos de todas las universidades capitalinas para la conformación de la Constitución, pero de igual forma habrá especialistas en áreas de desarrollo, derechos humanos, mejora regulatoria, transparencia, equidad de género, por lo que participarán “todos los sectores de la sociedad del Distrito Federal”.