Cancelar Tajamar habría costado $3,000 millones
Descarta Fonatur que haya un ecocidio e impedimentos legales para continuar las obras en la zona
Cancún, QR. EL NO haber realizado el desmonte de manglar en Malecón Tajamar la noche del sábado 16 de enero, el gobierno mexicano se habria hecho acreedor a demandas millonarias por parte de empresarios, del orden de los 3,000 millones de pesos, las cuales habrían tenido que pagar todos los mexicanos, aseguró Manuel Mercado Béjar, director jurídico del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
El funcionario presentó pruebas gráficas sobre el rescate de flora y fauna en el Malecón Tajamar previo al desmonte del pasado sábado 16 de enero que generaró protestas a nivel internacional, además de que aseguró que dicha área no es un sitio Ramsar, es decir, no forma parte del inventario de humedales protegido por organismos internacionales, como dieron a conocer ambientalistas.
Aseguró que de no haberse realizado esos trabajos, los 22 inversionistas que adquirieron terrenos en Malecón Tajamar habrían quedado en la más completa indefensión jurídica porque los permisos para el desmonte de los predios vencen el próximo 7 de febrero.
Indicó que el proyecto seguirá adelante conforme lo planeado, pues “no hay ningún impedimento técnico ni legal para continuar adelante”.
BENEFICIOS
Dijo también que Malecón Tajamar tiene una capacidad máxima para albergar 2,500 unidades de construcción en una superficie de 58 hectáreas.
La posibilidad de que se cristalicen las inversiones previstas para Malecón dan a Cancún la oportunidad de captar 11,500 millones de pesos en inversión inmobiliaria, además de la creación de 2,000 empleos permanentes, añadió.
TIENE SU ORIGEN EN ADMINISTRACIONES PANISTAS
Mercado Béjar se remontó a los orígenes del proyecto, el cual se presentó en el año 2000 a Fonatur, pero se concretó hasta 2005 en que se otorgaron los primeros permisos de impacto ambiental y un año más tarde los de uso de suelo.
Añadio que el impacto ambiental en la zona comenzó a darse desde 2006 en que se realizaron los primeros trabajos de urbanización y no la noche del 16 de enero.
La lotificación que se hizo durante los seis años que duraron los trabajos de Fonatur aislaron a los manglares sobrevivientes al interior del Malecón, cortando el flujo hidrológico de la laguna. Es decir, las 58 hectáreas que cuentan con la autorización para ser urbanizadas en Malecón, son terrenos ya impactados con baja diversidad biológica dado el desarrollo urbano de los alrededores del predio, explicó.
E insistió que los predios se comercializaron desde antes de 2012 en que inició la actual administración federal.
Mercado Béjar negó que los trabajos de desmonte del pasado sábado 16 de enero hayan sido un ecocidio, pues se cumplieron cabalmente con las 16 condicionantes de ley para estos casos. Mas aún, dijo, Fonatur renunció la posibilidad de comercializar 107 hectáreas colindantes con el Malecón Tajamar para crear en ellas un parque urbano de conservación natural mucho más grande que la zona impactada de Malecón Tajamar: el Ecopark.