PEMEX BUSCA NUEVAS ALTERNATIVAS
NUEVO FONDO PETROLERO, EL RETO
La petrolera maximizaría la producción que se tiene en los campos asignados en la Ronda Cero: A. Escalera.
A TRES años de la reforma energética, Pemex se mantiene con un débil régimen de transparencia, acceso a la información, responsabilidades y rendición de cuentas del nuevo Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo (FMPED), señala Fundar, Centro de Análisis e Investigación.
En un análisis, señaló que el FMPED es un fideicomiso que tiene a cargo la gestión de todos los ingresos generados por la explotación de los hidrocarburos y supone riesgos para la adecuada gestión de la principal fuente de recursos del presupuesto público.
“Pemex, al convertirse en empresa productiva del Estado, cuenta ahora con una serie de regímenes especiales que la excluyen de las disposiciones legales aplicables a la Administración Pública Federal y dejan buena parte de las decisiones y las acciones de control, auditoría y responsabilidades en el nivel interno. Esto significa la creación de un terreno propicio para los conflictos de interés y una mayor discrecionalidad en la toma de decisiones, que puede ir en perjuicio del interés público”, advirtió el organismo.
La organización explicó que los cambios realizados en los procesos de negocios de Pemex afectan los ingresos del Estado.
Destacó que la flexibilidad del nuevo régimen fiscal de los contratos de Pemex es definido discrecionalmente en cada proceso de contratación por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en lugar de que lo haga por medio de una ley general como sucedía anteriormente.
“Este cambio puede afectar los ingresos públicos del país, ya que los aportes que hacía Pemex han sido por muchos años la principal fuente de ingresos del Estado mexicano”, explicó en su balance de tres años.
De acuerdo con el análisis, en el nuevo marco legal se establecen leyes que permiten el uso de una serie de mecanismos que permiten asegurar que los proyectos puedan operar, incluso por encima de consideraciones sociales, ambientales yclimáticas.
“De esta manera, se debilitan los mecanismos que tienen las comunidades indígenas y campesinas y la sociedad en su conjunto para exigir sus derechos ante proyectos que pueden ponen en riesgo los territorios, las poblaciones y el ambiente”, criticó.
Desde su perspectiva, este marco legal crea una situación que agrava la situación de las comunidades ante los planes del gobierno de impulsar la extracción de hidrocarburos no convencionales (shale gas y shale oil) mediante la fracturación hidráulica (fracking), una técnica que consideran que es altamente dañina y que “pone en peligro la vida humana, los ecosistemas y el clima”.
Fundar consideró que los retos de México a raíz de la reforma energética se están manifestando en sus primeras fases de implementación, de ahí que crean que es importante seguir generando información y reflexión en torno a los cambios legales introducidos por la reforma.
El nuevo fondo petrolero es un fideicomiso que tiene a cargo la gestión de todos los ingresos generados por la explotación de los hidrocarburos.