Demanda de crédito bancario se mantiene sin cambios
Financiamiento al consumo subió 3.1%; y el de vivienda 2.8%
LA DEMANDA de crédito bancario se mantuvo prácticamente sin cambios en el primer trimestre del año respecto al periodo previo, salvo en el automotriz que mostró una disminución, y para el segundo trimestre se espera una tendencia similar, pero con una baja en grandes empresas.
Lo anterior se desprende de la Encuesta sobre Condiciones Generales y Estándares en el Mercado de Crédito Bancario que el Banco de México (Banxico) realizó a los directivos responsables de otorgamiento de crédito en bancos comerciales para el primer trimestre del año.
“Los bancos con mayor participación de mercado percibieron en promedio que la demanda en la mayoría de los segmentos permaneció prácticamente sin cambios con relación al trimestre anterior, con excepción del crédito automotriz, para el cual señalaron en promedio una menor demanda”, explicó el Banxico.
Agregó: “Por otra parte, los bancos con menor participación de mercado en los segmentos respectivos reportaron en promedio aumentos en la demanda de crédito por parte de pymes no financieras y de intermediarios financieros no bancarios. En contraste, percibieron en promedio una menor demanda en personales e hipotecarios”.
De acuerdo con el propio Banxico, a marzo pasado la cartera de crédito vigente de la banca comercial al sector privado creció 5.7% real anual. Al interior, el crédito al consumo aumentó 3.1%; el de vivienda, 2.8%, y el de empresas y personas físicas con actividad empresarial, 9.0 por ciento.
De acuerdo con el resultado de la encuesta, las expectativas de los bancos con mayor participación para el segundo trimestre son que haya un incremento en la demanda de crédito hipotecario y una disminución en la de empresas grandes; mientras que no esperan cambios significativos en los demás segmentos.
Por su parte, los bancos con menor participaciónesperan, en promedio, aumentos en la demanda de crédito de las pymes no financieras y de los intermediarios no bancarios, en tanto que para el resto de los segmentos se espera que permanezca prácticamente sin cambios.
En cuanto a las condiciones generales y estándares de aprobación del crédito durante el primer trimestre del 2018, los bancos con mayor participación de mercado señalaron en promedio haber estrechado las condiciones de oferta en los segmentos de empresas grandes y créditos personales y, respecto a pymes, intermediarios financieros no bancarios, tarjetas de crédito, automotriz, de nómina e hipotecario, las condiciones de oferta se mantuvieron prácticamente sin cambios.
En tanto, los bancos con menor participación reportaron en pro- medio haber estrechado las condiciones de otorgamiento y estándares de aprobación de crédito a las empresas en general así como en los segmentos de créditos al consumo vía tarjetas y personales.
“Por otro lado, este grupo de bancos reportó en promedio condiciones de oferta similares a las del trimestre previo en los segmentos de crédito automotriz, crédito de nómina y crédito hipotecario”, refirió el documento.
Respecto a las expectativas para el segundo trimestre del 2018, los bancos con mayor participación prevén en promedio un estrechamiento adicional en la oferta de crédito a pymes, mientras que para el resto de los segmentos anticipan que permanezcan sin cambio. En tanto que los bancos con menor participación esperan condiciones de oferta más estrechas, en promedio, para las carteras de crédito a empresas grandes e intermediarios financieros no bancarios y para el resto de los segmentos no prevén cambios. A decir de los encuestados, los bancos en su conjunto percibieron una disminución de la confianza de las empresas y los hogares en la actividad económica y señalaron ciertos aumentos en su posición de liquidez.
Los bancos con mayor participación de mercado percibieron que en el trimestre en cuestión se presentaron en promedio mejorías en el entorno económico internacional y en las condiciones de empleo para los hogares y, a la par, percibieron un empeoramiento en la situación económica de las empresas y menor disponibilidad de fondos en moneda nacional y extranjera.