UIF denuncia, por operar recursos de origen ilícito, a Murillo Karam
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) denunció el lunes pasado, 14 de noviembre, a Jesús Murillo Karam, exprocurador General ante la Fiscalía General de la República por “operaciones con recursos de procedencia ilícita”.
En una tarjeta informativa la instancia refirió que los delitos predicados, en específico, son “tráfico de influencias y defraudación fiscal”.
La UIF explicó que realizó un análisis de riesgos respecto a las Personas mexicanas Expuestas Políticamente (PEP) mencionadas en la investigación de los Pandora Papers, la cual se dio a conocer en octubre del año pasado y donde se mencionó al exprocurador.
Tras ello se identificó que Murillo Karam posiblemente esté relacionado con un esquema de operaciones con recursos de procedencia ilícita, delito previsto en el Código Penal Federal, esto al detectar que una empresa familiar, en la que destaca como socios sobrino, yerno e hijos del exprocurador, resultó beneficiada con contratos del gobierno federal cuando éste se desempeñaba en su cargo.
“En este sentido, se identificó que la referida empresa, en el periodo de 2013 a 2015, obtuvo licitaciones por parte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), y en ese mismo lapso la PEP tenía como secretario al hijo del entonces titular de la SCT, por lo que, posiblemente se trató de un esquema de contraprestaciones mutuas, en donde a través de influencias se benefició con contratos a la empresa familiar”, detalló la UIF.
Domicilios anómalos
Asimismo, dicha empresa familiar presentó irregularidades en su forma de constitución ya que los domicilios reportados no son acordes con las actividades que indicó realizar.
De igual forma, fiscalmente declaró deducciones similares a sus ingresos acumulables lo que hace inviable el sostenimiento económico de la misma, al tener ganancias mínimas, situación que contrasta con el volumen de contratación pública que recibió y las operaciones financieras frente a lo declarado fiscalmente.
También se identificó envió y recepción recursos con empresas simuladoras listadas en el 69 B del Código Fiscal de la Federación, es decir, empresas fantasma, por lo que podría dar lugar a una posible defraudación fiscal.
La UIF agregó que se identificó que, en el 2017, Murillo Karam recibió 2.8 millones de dólares por concepto de un retorno de inversión del extranjero, mientras que del 2020 al 2021 colocó en el extranjero 26.5 millones de pesos en cuentas propias, los cuales no fueron declarados ante el SAT.
El órgano de la SHCP refirió que para su investigación se basó en los datos de la investigación periodística conocida como los Pandora Papers.