El sueño del bitcoin
Las criptomonedas como el bitcoin, que es la más conocida se ha puesto en el foco de atención de las últimas semanas en todo el mundo, incluido México en donde el tema al menos ya forma parte oficial de la nueva Ley Fintech, aunque no necesariamente se plantea su aceptación como moneda de curso legal, sólo es un activo que deberá regularse.
Mucho se habla de los récord alcanzados del bitcoin, pero quizás uno de los mejores análisis sobre esta monera fue el que hizo de Bofa Merrill Lynch Global Research que lo analiza frente a otros activos como el oro, o bien como opera en mercados emergentes en donde tiene una amplia volatilidad, y sobretodo muestran que el bitcoin no está correlacionado con ningún activo financiero, y no existe una forma de explicar ni predecir el retorno.
En el análisis que hacen recuerdan que antes fue la sal la moneda de trueque pero las divisas respaldadas en materias primas no eran medios de intercambio prácticos ni duraderos, luego surgieron las monedas y hoy las criptomonedas digitales descentralizadas aparecieron en la etapa más crítica de la crisis financiera global del 2009, donde tienen algunas ventajas por encima de las monedas fiduiciarias, como la habilidad de transferir dinero instantáneamente desde cualquier lugar del mundo a un bajo precio, o poder codificar obligaciones contractuales específicas.
Sin embargo, consideran que una moneda de reserva tiene que cumplir con tres criterios: seguridad, liquidez, y rendimiento. Adicionalmente existen factores que “le suman puntos”, como la diversificación de beneficios. Bitcoin y otras criptomonedas tienen buenos puntajes en algunos criterios, y no tan buenos en otros, como el de la volatilidad, que es muy alta comparada con la del euro, el yen, e incluso el oro, entre otras debilidades.
Para los principales directivos de bancos mexicanos, es un bien o activo, pero no una moneda, aunque eso no signifique que alguno ande pensando en cómo atraer al nicho de personas que hoy están más que obsesionadas con esta criptomoneda, lo cual si se aprueba la Ley Fintech podría abrir la puerta para al menos con Sanbox hacer pruebas de qué productos o servicios podrían asociar con esta criptomoneda, aunque hay otros directivos más tradicionales que consideran que el bitcoin es usado principalmente por todo tipo de delincuentes, por lo que veremos un interesante debate sobre esta moneda en nuestro país y que no pasará de 2018 en donde un banco ya esté realizando algunas pruebas con esta criptomoneda, que hoy comprar una de ellas, es el sueño de varios.
Y en el otro lado de la moneda, hoy es un día importante para tres instituciones, en primer lugar para el Infonavit que realizará la 115 Asamblea Ordinaria en donde todo el sector financiero tanto público como privado, así como representantes de trabajadores se dan cita para conocer los avances que se han tenido, uno de ellos es que este año, tras el incremento del monto del crédito y las mejoras para agilizar el otorgamiento de crédito, la derrama económica del Infonavit rebasa ya los 220 mil millones de pesos, cuando el año pasado fueron 178 mil millones de pesos.
Pese a que los bancos no les gustó nada el incremento de la línea de financiamiento que da el Infonavit, negocios son negocios y con los otros esquemas que tienen en conjunto como el Mejoravit, Cofinavit, Infonavit Total y el segundo crédito, lograron aumentar en más de 30 por ciento el financiamiento que dan con los bancos en estos programas. En este año estarían dando más de 500 mil créditos tanto hipotecario como de mejoramiento. Lo interesante de todo esto además, es será también ver los cambios que se harán en materia de hipoteca, subcuenta de vivienda y seguros tras los sismos de septiembre, ese sin duda será uno de los retos pendientes.
Y las otras dos instituciones que hoy definen su futuro, son Banorte e Interacciones los cuales tienen su asamblea de accionistas en donde definirán el rumbo de esos bancos, su fusión para convertirse en el banco número dos del sistema bancario mexicano. Por lo pronto la moneda está en el aire.