El nuevo campo de batalla es digital
Quienes se escandalizan por las noticias del acercamiento de Google con el ejército estadounidense o por la presencia de éste en Silicon Valley han olvidado los orígenes de internet: fue una creación militar, una red de nodos para resguardar la información en caso de una guerra nuclear.
La relación entre el ejército y la tecnología es ancestral, en términos de la era digital. Y de siempre. Habrá que recordar que el Homo sapiens surgió cuando pudo vencer al Neardenthal, gracias a su actitud belicosa y a sus herramientas, la tecnología de hace muchas eras. Los antropólogos dicen que esa fue la verdadera Madre de todas las guerras, la más definitoria. Ya hace varias décadas que cientos de ingenieros del MIT trabajan para las fuerzas armadas, en el desarrollo de armamento y de tecnología. Y por qué no, es donde más dinero hay. La milicia (como otras áreas) se corporativizado La carrera espacial derivaría de la demostración de las grandes potencias en innovar en términos de telecomunicaciones para el espionaje desde el espacio exterior.
En EU y otros países hay más recursos para la guerra que para la salud o la educación y esto es por el corporativismo que provoca que las guerras sean un negocio. Ya no es un tema de soberanía. Es otro tema. Tenemos que vender más aviones, más tecnología, más armas.
Que los empleados de Google abandonen esa empresa por su proximidad con la industria bélica es una cuestión de principios, quizá, pero que quede claro que esto ni es novedad ni será distinto en los años venideros. Todo lo contrario: las guerras que vienen serán entre máquinas y drones, será una guerra de ideas y de poder, no de heridas humanas.
La inteligencia artificial será un imperio en esas nuevas guerras digitales. La guerra no será entre humanos, sino entre robots y algoritmos. Si en las guerras ya no matan personas, ¿En dónde estará la merma, qué matarán: máquinas? El nuevo campo de batalla es digital. Lo que tratarán de imponer son las ideas. El mejor ejemplo es lo que le hizo Rusia a EU en las pasadas elecciones. La Unión Americana perdió. Los conocimientos están homologándose en todo el planeta a través de los medios digitales, el poderío que viene se manifestará ahí. Están, por lo pronto, los activos rusos. Y los chinos, haciendo su apuesta por la alta tecnología.
No se puede separar la innovación ni la tecnología de la milicia, es una sinrazón. Menos cuando el corporativismo está hasta la médula. Los gobiernos van por el poder tecnológico, el de los conocimientos y la comunicación digital. Estamos en la era de las ideas que permean en el espacio digital, el nuevo gran campo de batalla.
Fundador y Presidente del Consejo de Metrics