Mis finanzas y la economía con López Obrador
Sin duda, la evolución económica nacional afecta nuestras finanzas y las políticas del nuevo gobierno tendrán una influencia decisiva en dicha variable; aunque ya se justificó López Obrador de los posibles malos resultados, diciendo que le dejan el país en bancarrota. Debemos evitar sobredimensionar el efecto positivo o negativo que puedan llegar a tener las estrategias de la próxima administración federal. Dejemos de ser un país de caudillos, pensando que la solución de los problemas históricos depende de un sólo hombre.
En un mandato de seis años es imposible realizar todos los cambios necesarios para alcanzar un mejoría sustancial en el bienestar. Considero que una aspiración legítima sería poner las bases, mas los resultados, si son positivos, se irán viendo con el paso del tiempo.
De facto, la pobreza es un fenómeno multifactorial, pues tiene sus orígenes en la cultura, la educación, la infraestructura, las condiciones geográficas, la política, entre otros factores. Se suponía que con insertar a México en la globalización se reduciría el número de personas viviendo en la miseria, pero esto no ha sucedido a pesar de que somos una de las naciones con más tratados comerciales.
Ni en las economías centralmente planificadas se puede determinar las cosas por decreto y el mercado define, para bien o para mal, muchas de las consecuencias. El hecho es que dependemos del crecimiento que hasta ahora ha sido mediocre y los resultados de la nueva administración estarán atados a la disposición de la iniciativa privada y al acontecer internacional.
Se ha comprobado que el asistencialismo es un simple ‘mejoral’ para un cáncer social como la pobreza. Sólo sirve para la foto del político, pero no destraba las causas estructurales que la sostienen.
El punto principal es establecer una estrategia de impulso regional con un avance económico agresivo, pues se requiere crecer a tasas superiores a 4 por ciento en la producción para darle la vuelta al desempleo y a la informalidad, mientras que lo hemos hecho en alrededor de 2 por ciento en promedio.
Nada más cierta la frase de José Ortega y Gasset “Yo soy yo y mis circunstancias”…. Independientemente, de las acciones del gobierno de López Obrador, es importante tener una visión proactiva sobre nuestro futuro financiero, de tal manera que estemos pendientes de las oportunidades y de los riesgos en el camino, porque es inútil repartir culpas o esperar algo que nunca sucederá.