Mayoría de tenedores del NAIM reitera rechazo a oferta
La oferta del gobierno sobre los bonos del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) enfrenta un nuevo reto. El conjunto de inversionistas denominado “Grupo de Tenedores de Bonos Ad Hoc de MexCAT”, aseguró ayer en un comunicado que no solo tienen más del 50 por ciento en un tramo de los bonos emitidos para la construcción del proyecto aeroportuario, sino que cuentan con más del 50 por ciento de la emisión completa, por 6 mil millones de dólares.
Ese monto complica la situación para el gobierno, pues el grupo reiteró que rechaza la oferta que les fue presentada, por lo que deberá ser modificada.
“El Grupo de Tenedores de Bonos Ad Hoc de MexCAT, que consiste en un grupo de grandes instituciones internacionales de inversión, no puede respaldar la oferta de compra y la solicitud de consentimiento del fideicomiso MexCAT en su forma actual”, señaló la misiva emitida ayer por la noche por el despacho Hogan Lovells, representante de los tenedores.
Los bonos han atravesado por una alta volatilidad desde que se conoció el resultado de la consulta realizada por el nuevo gobierno para cancelar el proyecto.
73.7
DÓLARES
PROYECTAN BAJA DE PRECIO
bre en torno al proyecto del aeropuerto, el precio de los bonos emitidos para financiar esa obra caerá por debajo de 80 dólares. “(Seguirán cayendo) si no se da una definición pronta a los tenedores de bonos mediante la cual se defina qué parte o partes del nuevo sistema aeroportuario contribuirá con su TUA al pago de intereses y al principal, si serán los 3 aeropuertos los que contribuyan, o sólo el de Benito Juárez”, comentó a El Financiero Rafael Elías, director de Exotix crédito para América Latina.
Por lo anterior, el fondo recomendó a los inversionistas comprar esos bonos cuando estén en los 70s medios y venderlos a los 90 dólares o por encima de eso. Según Luis Torres Gutiérrez, abogado especialista en derecho bursátil, las recompras de bonos por parte de gobiernos históricamente han traído repercusiones a los mercados.
“Me parece que las recompras de bonos respaldados por gobierno históricamente han generado mayor incertidumbre a los mercados. Sobre todo en bonos que traen como subyacente un proyecto de infraestructura a largo plazo”, dijo en entrevista con El Financiero.