La Huexca se incendia
El asesinato del líder social y periodista Samir Flores es el cerillo que incendia la yesca, y que alcanzará su clímax en la encuesta que se llevará a cabo para dilucidar el futuro de la termoeléctrica asentada a 4 kilómetros de la carretera federal 160, que conecta Cuautla con Izúcar de Matamoros. Con el crimen no sólo se alebrestaron los pobladores de la región, sino también organizaciones nacionales como el Consejo Indígena de Gobierno y el Congreso Nacional Indígena, amén de ambientalistas, vamos, hasta el EZLN, quienes responsabilizaron directamente al Presidente por ese asesinato. En verdad los ánimos están muy caldeados, a ello se agrega la obstinación de AMLO de llevar a cabo la consulta popular, a la que se oponía Samir porque sabía que el resultado iba dar pie a la operación de la termoeléctrica, proyecto que siempre descalificó por poner en riesgo la dotación de agua a la región. La termoeléctrica de Huexca forma parte del Proyecto Integral Morelos, en el cual se invierten 700 millones de dólares para producir 620 megawatts de electricidad. Tendrá una vida útil de 30 años. Terminado este periodo y dependiendo de las condiciones del mercado y técnicas de la Central, se decidirá si continúa con la operación o se procede al abandono del proyecto.
Fiel al estilo del nuevo gobierno y ante el rechazo de los pobladores a la termoeléctrica se dan los últimos toques a la consulta popular que, al igual a la que canceló el nuevo aeropuerto de Texcoco, es inconstitucional, y no obstante ello existe una campaña entre los pobladores de que la luz será más barata con la operación de esta nueva planta. Los días 23 y 24 de febrero se hará la simulación, digo la consulta, que sin esperar su conclusión ya sabremos cuál será el resultado. Se instalarán 147 módulos de participación ciudadana en 36 municipios de Morelos, 15 de Puebla y 9 municipios de Tlaxcala.
El presidente López Obrador ha declarado que si esta planta no opera, se tendría que comprar energía a las empresas particulares extranjeras, esto ante aquellos que enarbolan las banderas de oponerse, incluso por razones de tipo ideológico.
El proyecto nació en el sexenio de Felipe Calderón, se mantuvo con Peña Nieto y ahora la retoma AMLO, y salvo que ocurra otra tragedia, entrará en operación en los próximos meses. Samir Flores, de 30 años de edad, ya había sido objeto de amenazas con anterioridad. El activista, campesino y miembro del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y del Agua (FPDTAMPT) era fundador de la radio comunitaria Amiltzinko. Desde este medio, había hecho campaña contra la termoeléctrica y el gasoducto que transporta gas natural a lo largo de 150 kilómetros hasta la planta para producir la electricidad.
El Presidente de la República debe sensibilizarse ante el asesi- nato del activista morelense con la indicación tajante de castigar a los culpables y con la suspensión de operación de la obra. En nada abona a la paz del país alebrestar al pueblo bueno y sabio, porque hacerlo implicaría despertar a ese México Bronco que está aletargado pero no sumiso.
La decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador de someter el proyecto a consulta popular ha sorprendido a los habitantes de la región, en donde Morena arrasó en las elecciones de 2018. En un discurso de 2014 López Obrador equiparaba la construcción de la termoeléctrica, en esta zona tan cargada de historia revolucionaria, a “un basurero en Jerusalén”. Hace una semana, el mandatario defendió la termoeléctrica de Huexca por el desperdicio que supondría dejarla parada.