Improvisada ceremonia juarista
La improvisada ceremonia del aniversario luctuoso de Benito Juárez fue tan inesperada que no había invitados. La logística se armó tan a prisa que los asistentes tuvieron que ser trabajadores de la Secretaría de Hacienda. De hecho, llegaron tantos que el mismo secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, se quedó sin asiento. Al cabo de unos minutos le hallaron un sitio… en la fila de honor junto al Presidente.