Alza en impuestos y nuevas cargas tributarias
Con el desplome del PIB, las inversiones, el empleo y otros indicadores macroeconómicos en este año, las perspectivas para el otro lucen peores, toda vez que se suman factores externos como la caída en el precio del petróleo, el recrudecimiento de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, entre otros.
Los ingresos en 2020 para las arcas públicas mantienen su inercia a la baja, por lo que ante un Presupuesto de Egresos que cada vez va en aumento, se habla de 6.3 billones de pesos, pues la cobija no alcanzará para cubrir todos los rubros, ni siquiera los prioritarios para el presidente López Obrador.
Las elecciones intermedias de 2021, en las cuales se renueva la Cámara de Diputados federal, entre otros tantos puestos de elección popular, obliga al gopara
a gastar más en favor de la gente y con ello granjearse su voluntad en la cita con las urnas. Ante este entorno ya de suyo complicado, en donde se requiere billete fresco, sólo hay dos opciones: endeudarse o subir los impuestos o de plano las dos cosas; de hecho ya desde el Congreso se preparan en las definiciones del Paquete Económico el próximo año, el incremento tributario y la creación de nuevas tasas impositivas. El diputado morenista Alfonso Ramírez Cuéllar, presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, señaló que en 2020 el crecimiento económico y los ingresos del país han sido afectados por el entorno internacional, y a esto se suman los gastos ineludibles como pensiones, deuda pública, aportaciones, participaciones y adeudos fiscales, por lo que es necesario identificar mecanismos fiscales para mantener finanzas públicas sanas.
La desaceleración económica provoca la caída de los ingresos tributarios, por lo que para la 4T es vital obtener mayor captación y eso sólo lo alcanzarán con un incremento sustancial en los impuestos.
Gravar alimentos y medicinas con el IVA es una manzana demasiada apetitosa que estarán tentados a comer. Respecto al comercio electrónico, indicó el exdirigente del Barzón, en sintonía con el Grupo de los 20 y la OCDE se busca que las empresas residentes en el extranjero que prestan servicios en territorio nacional paguen impuestos por los ingresos que reciben de los mexicanos. En relación con el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para gravar el tabaco, alcohol, bebidas azucaradas y alimentos no esenciales altos en densidad calórica, se busca actualizar la tasa para inhibir el consumo de dichos productos, que derivan en altos costos de atención en el sector salud y en baja de productividad por enfermedades asociadas.
Sobre los gastos fiscales, apuntó que se están analizando las desviaciones tributarias para detectar si los objetivos para los que fueron creadas han sido cumplidos y tienen razón de ser en el contexto actual, por lo que la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública solicitó a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) hacer una revisión de estos gastos, con la intención que en el Presupuesto 2020 se incluyan medidas que permitan obtener una mayor recaudación, redirigiendo incentivos fiscales y evitar la elusión fiscal.
Dice el legislador que se deben redefinir las reglas para acceder a los 485 mil millones de pesos anunciados por la SHCP, así como realizar los cambios legales para que los fondos de estabilización presupuestaria (Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios, con recursos actuales por 296.3 mmdp, y el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas, con 93.5 mmdp) puedan utilizarse como medidas contracíclicas.