‘Premian’ a Altán Redes con 20 años más para sanear deudas y finanzas
Analistas ven que el apoyo a la empresa es en perjuicio de los demás teleoperadores
Altán Redes tendrá asegurado su negocio por 40 años, en lugar de los 20 años originales, lo que le permitirá contar con dos décadas más para sanear sus deudas por más de 30 mil millones de pesos (alrededor de 4 mil 283 millones de UDIS) con mayor tranquilidad, tras ser rescatada de la quiebra por el gobierno y sus inversionistas con un financiamiento de 388.1 millones de dólares, una acción perjudicial para los demás operadores de telecomunicaciones que no gozan de los mismos apoyos, advirtieron analistas del sector.
El martes, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) confirmó la extensión del contrato de Asociación Público-privada (APP) firmado en 2017 con la entidad gubernamental Promtel y Telecomm para que Altán dé vida a la Red Compartida por 40 años en lugar de los 20 originales. Además, el órgano regulador avaló el plan de rescate de la empresa, que fue fondeado principalmente por el gobierno, luego de informar que la banca mexicana de desarrollo sería la encargada de nombrar a la mayoría de los miembros del Consejo de Administración de Altán Redes. La compañía acumuló deudas por más de 30 mil millones de pesos con firmas como Huawei, Axtel, Morgan Stanley, Megacable, Hansam y China México Found. Gerardo Flores, miembro del Instituto del Derecho de las Telecomunicaciones (IDET), afirmó que las decisiones que tomó el IFT al avalar la operación no puede estar influenciadas por el gobierno, además de que privilegiar los objetivos de una empresa, por encima de otros operadores viola el principio de igualdad de competencia establecido en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). “Otorgar beneficios a Altán en perjuicio de los operadores de telefonía móvil podría violar el T-MEC, generando un problema donde antes no había. Hay compromisos que tiene México en el marco del T-MEC, debemos tener cuidado para evitar que el IFT adopte ciertas medidas que parezcan trajes hechos a la medida para que mejore el panorama operativo de Altán Redes”, advirtió.
Agregó que, mientras el gobierno federal sea el principal controlador de un operador de telecomunicaciones, como es el caso de Altán Redes, es imposible asegurar que el órgano regulador de las telecomunicaciones, el IFT, será neutral y autónomo. De los 388.1 millones de dólares que recibió Altán, la banca mexicana de desarrollo con el aval del gobierno, otorgó un crédito por 161 millones de dólares, es decir, 41 por ciento de los recursos, y el 59 por ciento restante corresponde a la participación de proveedores que aportaron 166.6 millones de dólares, 50.5 millones de dólares provienen de los accionistas y 10 millones de dólares de sus clientes.
ECONOMÍA NIEGA AFECTACIÓN
Al respecto, la Secretaría de Economía sostuvo que el financiamiento recibido por parte de Bancomext no contraviene las disposiciones contenidas en el T-MEC, debido a que el gobierno mexicano garantiza que actuará con imparcialidad, respetando a cabalidad lo previsto en el capítulo 18 Telecomunicaciones del T-MEC.
“El capítulo establece que el Estado debe evitar acciones que otorguen un trato más favorable a