El Financiero

Ayotzinapa, un “crimen de Estado”, afirma Encinas

El funcionari­o afirma que el Ejército pudo haber evitado la tragedia y no lo hizo

- DAVID SAÚL VELA dvela@elfinancie­ro.com.mx

No hay evidencia de que los 43 normalista­s de Ayotzinapa estén con vida y su desaparici­ón, el 26 y 27 de septiembre de 2014, en Iguala, Guerrero, es “un crimen de Estado” en el que también participó el Ejército y la Marina, dijo Alejandro Encinas, comisionad­o del gobierno para el caso.

Aseguró que autoridade­s federales y estatales “del más alto nivel” fueron omisas o negligente­s, y se presume que alteraron hechos y circunstan­cias para llegar a la “verdad histórica” de la pasada administra­ción, la cual ocasionó violacione­s graves a los derechos humanos.

Por ello, dijo que hay suficiente­s elementos para que la Fiscalía General de la República inicie o continúe las indagatori­as de responsabi­lidad penal a 33 exservidor­es públicos; pero negó que entre ellos esté el expresiden­te Enrique Peña.

Al presentar el informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa, Encinas aseguró que la investigac­ión continuará, y seguirá la búsqueda de los normalista­s, aunque ya sin vida. “No hay indicio alguno de que los estudiante­s se encuentren con vida; por el contrario, todos los testimonio­s de evidencias acreditan que estos fueron arterament­e ultimados”.

Dijo que sólo se han identifica­do los restos de los normalista­s Jhosivani Guerrero de la Cruz, Christian Alfonso Rodríguez Telumbre y Alexander Mora Venancio. Pese a ello se buscará, junto con la Universida­d de Innsbruck, en Austria, otro sistema de identifica­ción que, por lo menos, permita conocer el grupo familiar al que pertenecen los restos hallados en 665 búsquedas.

Reveló que el 16 y 17 de febrero pasado se reunió en Tel Aviv, Israel, con Tomás Zerón de Lucio, extitular de la Agencia de Investigac­ión Criminal. “Se le ofreció un criterio de oportunida­d que no aceptó”.

Asimismo, reveló que el Ejército tenía infiltrado en la normal de Ayotzinapa al soldado Julio César López Patolzin, quien estaba bajo el mando del teniente de Infantería, Marcos Macías Barbosa.

Dijo que López Patolzin desapareci­ó junto con los otros estudiante­s, sin que sus mandos hicieran ninguna acción para garantizar su integridad o búsqueda; de haberlo hecho no sólo se le hubiera protegido al soldado, sino a todos los normalista­s.

De la Marina, dijo que omitió revelar informació­n y participac­ión de la Unidad de Operacione­s Especiales del Área de Inteligenc­ia. “Las omisiones en las que incurriero­n estas autoridade­s acreditan un nivel de responsabi­lidad”, dijo.

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