El regalo de cumpleaños para AMLO
El próximo domingo 13 de noviembre, el presidente López Obrador cumple 69 años y qué mejor regalo para festejarlo que una manifestación multitudinaria en todo el país en defensa de la democracia y del Instituto Nacional Electoral.
El jefe del Ejecutivo federal cada vez que puede, insiste que es un demócrata por antonomasia y si es cierta esa aseveración, como su decisión de irse a su rancho cuando termine su periodo constitucional, el próximo 30 de septiembre de 2024, entonces es un buen regalo que le hará a los marchistas que participarán en una de las manifestaciones más numerosas que se ha llevado a cabo en contra del presidente de la República.
La reforma electoral del presidente, en los términos que está redactada para que Morena se perpetúe en el poder al cerrar los espacios políticos de representación a la oposición, le cierra también las posibilidades para acceder al poder en forma casi total.
Tal como sucedió en tiempos de la “Dictadura Perfecta”, como la catalogó el escritor peruano Mario Vargas Llosa, a la permanencia del PRI en el poder por más de 8 décadas, en donde el gobierno fue juez y parte como autoridad electoral; justamente ahora se pretende replicar ese modelo con la reforma electoral de AMLO.
En protesta a esa pretensión y en defensa del INE, el próximo domingo saldrán a manifestarse un buen número de mexicanos en 26 ciudades del país y en varias de la Unión Americana, que de ninguna manera son reaccionarios, fifís, conservadores o bandidos, como los calificó AMLO, sino son ciudadanos comprometidos con el presente y futuro de México.
De hecho, buena parte de los manifestantes pertenece a la clase media y muchos de ellos son los emprendedores que generan más del 80 por ciento de los empleos que se crean anualmente en el país, por lo que sus descalifiaciones, son una falta de respeto que desprestigia a la figura presidencial.
Amado Avendaño, integrante de Frente Cívico Nacional que organiza la movilización, detalló que en la Ciudad de México se marchará del Ángel de la Independencia hacia el Monumento a la Revolución, descartando así que la movilización termine en el Zócalo capitalino, tal como “generosamente” propuso el presidente.
Al respecto, enfatizó que la decisión la tomaron las organizaciones, a pesar de que el presidente Andrés Manuel López Obrador les dijo que les permitía llegar al primer cuadro de la ciudad.
“El presidente quiere determinar cómo, dónde y con quién marchar. Las decisiones de la sociedad civil las tomamos la sociedad civil. Nosotros decidimos marchar del Ángel al Monumento a la Revolución, es una decisión de consenso, y el día que queramos ir al Zócalo lo vamos a decidir entre todos”, afirmó Avendaño.
Si realmente la 4T y su líder moral quisieran mejorar el modelo democrático mexicano, lo impulsarían para después, pero no en la víspera de la elección del Estado de México y, sobre todo, la presidencial y no ahora que tiene dedicatoria para instaurar la dictadura de Morena.
El diputado federal Juan Carlos Romero Hicks (PAN) dijo que hay áreas de oportunidad para optimizar a la incipiente democracia mexicana, por ejemplo, la implementación de la segunda vuelta, el voto electrónico, la sobrerrepresentación, la nulidad de elecciones cuando haya intervención de la delincuencia organizada, elecciones primarias, una mejor fiscalización de los recursos, el financiamiento de los partidos políticos, entre otros rubros.
“Hay muchos temas pendientes en democracia electoral, pero ahora no es el momento; y todas las reformas recientes que se han hecho no lograron el poder, se construyeron con los partidos políticos, con la propia ciudadanía, eso es lo que necesitamos hablar de cara y de frente. Además, no se hicieron en vísperas de una elección presidencial; necesitamos fortalecer las instituciones democráticas”, subrayó.
Ya que estamos con los panistas, qué bueno que anunciaron que, en su calidad de ciudadanos, acudirán a la marcha, en cambio causó cierto resquemor entre los organizadores y marchistas que Alejandro Moreno, líder nacional del PRI, anunciara también su participación en virtud de la existencia tácita y reconocida por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, de un acuerdo para aprobar la reforma electoral del presidente.
Este tipo de personajes solo enturbian una expresión ciudadana auténtica y sería mejor que Alito y sus compinches, no asistieran a la marcha, ya que al final del día apoyarán a los manifestantes, pero a la hora del voto, harán todo lo contrario.