Techos solares: crecimiento, seguridad y confiabilidad
Hace apenas dos semanas, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) presentó una propuesta de nuevas reglas para la generación distribuida que ha generado un debate muy pertinente en la opinión pública.
La generación distribuida es la generación local de electricidad en pequeña escala (menos de 500 kw) destinada principalmente al autoconsumo de usuarios en los sectores residencial, comercial e industrial; el 99% de estas centrales utilizan paneles solares por lo que suelen conocerse como “techos solares”.
Al primer semestre de 2022, se han instalado en México cerca de 300 mil techos solares que equivalen a un crecimiento en capacidad de más de 400% en los últimos 5 años. La instalación masiva de estas centrales se explica principalmente por una afortunada coincidencia: la reducción drástica de los precios de paneles solares a nivel mundial y una regulación nacional que buscaba incentivar su despliegue.
A pesar del enorme crecimiento en términos porcentuales, la capacidad instalada en techos solares (2,291 MW) aporta menos del 1% de toda la electricidad producida en el país. Esto muestra que el sector tiene aún mucho espacio para seguir creciendo.
Es en este entorno que la CRE propone una nueva regulación para el sector. El proyecto subraya la necesidad de incrementar la seguridad de los techos solares, una prioridad compartida por la industria en su conjunto.
Además de centrales más seguras, la propuesta plantea otras modificaciones: cambiar la fórmula por la que se remunera la electricidad excedente o sobrante que estos sistemas venden a la CFE y eliminar la posibilidad de que usuarios con sistemas más grandes, generalmente pequeñas o medianas empresas, puedan acumular la energía eléctrica sobrante fuera de su periodo de facturación.
El impacto que estas medidas podrían tener en el ritmo de crecimiento del sector requiere un estudio minucioso, para minimizar el riesgo de que las modificaciones propuestas hagan menos atractivos los techos solares para los consumidores y empresas que buscan reducir su gasto en electricidad y contribuir a la mitigación de emisiones en nuestro país.
Las cifras observadas entre 2017 y 2022 son una muestra clara de los resultados que pueden obtenerse con una regulación propicia a la transición energética. Sumemos a una regulación que priorice la seguridad de los usuarios sin comprometer el ritmo de crecimiento futuro.
Director General de la Asociación Mexicana de Energía Solar (Asolmex)
LOS CABOS, BAJA CALIFORNIA SUR
La proximidad geográfica con Estados Unidos y las facilidades para hacer negocios en Baja California Sur son elementos que están motivando a 25 empresas extranjeras a instalarse en el estado, con perspectivas de que esta lista se siga ampliando en los próximos meses, aseguró Alonso Gutiérrez Martínez, subsecretario de Economía de la entidad.
En el Foro Mar de Cortés 2022, destacó que la tendencia del nearshoring está siendo visible en Baja California Sur, ya que cada vez más firmas extranjeras buscan relocalizar sus líneas de producción, especialmente en agroindustria.
“Tenemos una característica, la economía del Estado en gran porcentaje depende del turismo directa o indirectamente, y estamos trabajando para empezar con esa industrialización, probablemente enfocado más a la agroindustria