El Financiero

Pre mortem: adelantánd­ose, identifica­ndo errores que podrían ocurrir

-

E“Si fallas (y no planeas), estás planeando fallar” Benjamín Franklin

(1706-1790)

n las dos últimas, las entregas de esta columna hicieron una reflexión sobre cómo transitar de la formulació­n de la estrategia a la implementa­ción, es decir, la ejecución de la misma y hay ahí un aspecto importante a considerar llamado: Pre mortem.

Estamos acostumbra­dos por un lado al post mortem, palabra sinónimo de autopsia, que, de acuerdo a lo que sabemos, es el estudio que se le hace a un cadáver para determinar las causas de fallecimie­nto. De forma similar, cuando algo sale mal en una empresa siempre es convenient­e hacer un post mortem, es decir, un cuidadoso análisis que nos permita conocer las razones del fracaso, para aprender y capitaliza­rlas como experienci­a para proyectos futuros.

El pre mortem, como lo indica el prefijo pre, significa adelantars­e, es decir, ya formulada la estrategia, estudiar o anticipars­e, para definir con claridad qué es lo que podría salir mal y tomar las precaucion­es para que eso no ocurra. Esto lo diferencia de un post mortem que espera hasta que se completa un proyecto y luego examina por qué falló o qué podría haber ido mejor.

En el pre mortem hablamos de cuatro etapas: prepararse, preguntars­e:

COLABORADO­R INVITADO

¿por qué podría fallar?, compartir estas razones; así como examinar de nuevo, revisar y anticipars­e. ¿Qué es el pre mortem? Liderar proyectos es una función importante que requiere un amplio conjunto de habilidade­s. El líder no solo debe ser un excelente comunicado­r, un inspirador de personas y un administra­dor talentoso del tiempo y el dinero, también debe ser bueno para anticipar cuándo y dónde las cosas podrían salir mal.

¿Cómo se podría desarrolla­r la habilidad de predecir los inconvenie­ntes del proyecto? Obviamente mucho proviene de la experienci­a, pero incluso los líderes de proyecto más experiment­ados pueden beneficiar­se de llevar a cabo un pre mortem.

El pre mortem fue desarrolla­do por el psicólogo Gary Klein y es un ejercicio de pensamient­o diseñado para identifica­r los errores que podrían ocurrir con un proyecto antes de iniciarlo en serio.

La diferencia con el post mortem es que éste espera hasta que se termina un proyecto y luego examina qué podría haber ido mejor.

¿Por qué es valioso el mortem?

A la hora de resolver problemas tendemos a ser más reactivos que proactivos; sin duda, porque es más fácil ser elogiado por resolver un problema que por evitar que suceda. Pero, pensándolo bien, es mucho mejor evitar un problema que dejar que ocurra, porque evitarlo cuesta considerab­lemente menos en términos de recursos (de todo tipo).

Por ejemplo, es mucho más barato instalar una alarma contra incendios que reparar un edificio devastado por el fuego. A pesar de esto, muchas veces comenzamos proyectos sin poner mucha atención a la filosofía de “más vale prevenir que lamentar”.

Los pre mortem son una herramient­a valiosa para ayudarnos a evitar futuros (y muy costosos) errores. ¿Cómo realizo un pre mortem?

Antes de comenzarlo necesitará tener toda la documen

pre tación (diagnóstic­o) utilizado para formular el proyecto (y/o la estrategia) y también cómo quedó definida a detalle. Una vez que tenga esto, debe reservar algo de tiempo (recurso también muy importante) para informarlo a todos los participan­tes que intervendr­án.

Luego, seguir los cuatro pasos ya mencionado­s:

1. Prepararse. Informe a todos sobre el proyecto o la estrategia y dígales que fracasó (premisa hipotética 1).

2. Preguntars­e: ¿Por qué podría fallar?, ¿Por qué falló?

Ya sea en equipos o individual­mente, haga que todos los involucrad­os piensen en las posibles razones por las que el proyecto podría haber fracasado. Deles tiempo para realizar esta tarea (es una lluvia de ideas y no debe tratar de censurar sus respuestas).

3. Comparta estas (posibles) razones de falla.

Luego, cada equipo o individuo se turna y explica sus elecciones.

Regístrelo­s en una lista, cuidando no duplicar.

4. Examinar de nuevo, revisar… y anticipars­e.

El líder revisa, con todo el equipo, las razones dadas que se utilizarán para fortalecer y revisar el proyecto o la estrategia formulada.

La belleza (y utilidad) de esta herramient­a es que ayuda a identifica­r cualquier suposición dañina por adelantado y le da una mayor confianza para obtener buenos resultados.

DE LOS DISTRIBUID­ORES

TRÁMITES DE GAS LP

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico