CUESTIONAR A LAS AUTORIDADES Antes que se nos olvide
Una de las exigencias ciudadanas más frecuentes a servidores públicos es transparencia cuando adquieren bienes o servicios, púes a través de los años, varios funcionarios deshonestos han otorgado millonarias licitaciones a amigos, compadres o empresarios que les dan “mochada”, en muchos casos no son castigados, ni siquiera exhibidos.
Un gran acierto de la administración de Vicente Fox fue haber promulgado la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información pública gubernamental, que entró en vigor a mediados del 2003, creándose así, el Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI), hoy llamado INAI. Cualquier mexicano puede solicitar información (excepto la que está clasificada como reservada o confidencial) a los llamados sujetos obligados, como son, Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial, partidos políticos, organismos autónomos, persona física, moral y cualquier otro que reciba y ejerza recursos públicos, según señala la página del INAI.
Este puente a la información gubernamental, en términos generales es poco aprovechado por la ciudadanía, quienes lo utilizan un poco más son académicos y/ o periodistas, que han sacado a la luz malos manejos o despilfarro en varias administraciones públicas, como cuando en el mandato de Felipe Calderón, apareció en el Canal de las Estrellas, la serie/ telenovela llamada “El equipo”, se centraba en las aventuras de cuatro elementos de la Policía Federal que combatían heroicamente a la delincuencia organizada; al principio el productor dijo que para realizarla el único apoyo de gobierno fue que les prestaron helicópteros , patrullas e instalaciones, pero posteriormente, la periodista Lilia Saúl Rodríguez, haciendo uso del acceso a la información, descubrió que el gobierno calderonista había pagado a Televisa 118 millones de pesos para realizarla y presentar a los mexicanos el trabajo de la Policía Federal, un gasto innecesario, además la serie fracasó, era irreal, totalmente hollywoodense. También se supo que Felipe Calderón gastó más de mil millones de pesos para construir una torre luminosa de 100 metros de altura, para conmemorar el bicentenario de la Independencia y centenario de la Revolución , llamada La Estela de Luz, el monumento a casi nadie gustó, además hubo irregularidades financieras durante su construcción que nunca fueron aclaradas. Calderón se fue, pero el problema se quedó, a mediados del 2017 el apoderado legal de la empresa Soluciones Bicentenaria, que renta el equipo para operar la torre, aseguró que les adeudaban más de 26 millones de pesos.
En agosto de 2015 se publicó en el periódico oficial la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado de Chihuahua, entrando en vigor el 4 de mayo del 2016, surgiendo así el Instituto Chihuahuense para la Transparencia y Acceso para la Información Pública (Ichitaip), en el artículo 2 de dicha ley señala que garantizan una información , veraz, completa, oportuna, accesible , confiable, verificable y en lenguaje sencillo, sin embargo, esto último en ocasiones no lo es, pues utilizan tecnicismos que son difíciles de comprender para el interesado y muchas veces al ver esto, desiste, pues parece que hablan otro idioma en el Ichitaip o INAI. Pero nuestro deber ciudadano es aprovechar esa información, no quedarse con la duda del uso que le están dando a nuestro dinero o cualquier otra inquietud que se tenga sobre alguna dependencia, si es complicado entenderle a Ichitaip o al portal de transparencia del Municipio de Chihuahua, acceda a monitorkarewa.org, un sitio en internet donde se muestra de manera amigable dicha información; Karewa es una agrupación civil encabezada por el empresario Javier Mesta, creada en agosto de 2016, la cual está enfocada en transparentar licitaciones públicas de los municipios, prevenir la corrupción en los procesos de compra, e incrementar la participación ciudadana. Actualmente Karewa está en Chihuahua y Cd. Juárez, próximamente en Aldama, Ojinaga, Delicias y Camargo, según señaló Javier Mesta, todo operado por ciudadanos que por fin desean hacer uso de un derecho constitucional olvidado, cuestionar formalmente a las autoridades.