Buzón privado
Hace unas cuantas semanas se publicó la convocatoria que arranca los programas de la Sagarpa a nivel estado de Chihuahua, después del de Proagro, totalmente subsidiario, es el programa más esperado por los productores.
El objetivo de éste es el de mejoramiento o creación de infraestructura para los productores agropecuarios, funciona con una parte, que ronda generalmente en el 50 por ciento de subsidio gubernamental, el 50 restante lo paga el productor, en el caso de beneficiarse con el programa.
Los recursos de este programa son aportados en una relación de 80 y 20 por ciento, por parte de la Federación y del Estado, respectivamente; los proyectos susceptibles de apoyarse son variados: mallas antigranizo, construcción de corrales y adquisición de equipo para productores pecuarios, así como adquisición de algunos tipos de equipos agrícolas y otros.
Pero este año, al igual que hace casi 8 años, existe un desánimo por parte de los campesinos y ganaderos por solicitar su participación en el programa, derivado de que, al menos en la región, han sido mínimos los beneficiarios, a pesar de que un buen número de productores ha presentado sus solicitudes en tiempo y forma.
En algunos de los casos les aprueban el proyecto, pero se les informa que se terminaron los recursos del programa, por establecer un ejemplo, hace tiempo, tan solo en el ramo frutícola se apoyaba la adquisición de mallas antigranizo hasta a 50 productores, cuando menos, hace tres años se autorizó solamente a un fruticultor, de los casi 150 solicitantes.
Es decir, los habitantes del sector rural no solamente sufren por los bajos precios de comercialización de sus productos, llámese leche y granos básicos, sino también por una desatención al sector, tanto del sexenio anterior, como por la actual administración estatal.
En la región los campesinos y ganaderos han logrado con esfuerzos, liderazgos importantes en el rubro de productividad en algunos productos como manzana, avena forrajera y maíz, así como destacan en la exportación de becerros, de ahí que es de extrema importancia el que los entes de gobierno relacionados con el campo eficienticen su participación y realmente apoyen el tan cacaraqueado desarrollo rural.