“Difícil cambiar estatus sanitario del ganado”
El Gobierno no cambia los estatus de zona contaminada por zona libre, lo que ha bloqueado la exportación de cabezas hacia Estados Unidos
Aunque pase más de un año después de corregir los problemas sanitarios previamente detectados en los hatos ganaderos, el Gobierno no cambia los estatus de zona contaminada por zona libre, lo que ha bloqueado la exportación de cabezas hacia Estados Unidos, refirió el diputado Javier Malaxechevarría, quien junto con el director de Desarrollo Rural de Cuauhtémoc, Carlos Gutiérrez Alire, han buscado revertir la situación que padecen productores de varios ejidos como sucede con los de El Rayo.
Puesto que ya no han surgido enfermedades como brucelosis o tuberculosis, Francisco Javier Malaxechevarría González ha buscado ante el secretario de Desarrollo Rural de Gobierno del Estado, Rubén Chávez Villagrán, llevar las inquietudes de los productores de ganado en relación con las denominaciones de zonas ganaderas “A” y “B”, específicamente en un área de los seccionales de Álvaro Obregón y Anáhuac, y por otra parte solicitar apoyos para la comercialización de maíz.
El legislador consideró que el Gobierno tiene que reconsiderar los estatus delimitados en cada zona, ya que la calificación de zonas A y B se establecieron hace varios años, después de muestreos levantados sobre la salud de los animales, sobre todo en hatos lecheros que son más propensos a enfermarse.
En el caso expreso del ejido El Rayo, donde hace varios años se detectó un brote de tuberculosis, no se ha podido recuperar el estatus sanitario, a pesar que en las consecuentes y periódicas revisiones las cabezas de ganado resultaron en negativo a alguna enfermedad.
El legislador reconoció que después de las pruebas negativas, hay un protocolo que sigue la cuestión de sanidad, tal vez tardado pero muy riguroso para que Estados Unidos permita nuevamente la llegada de ganado de esta región.
Al no aprobar aun la modificación de estatus para el ganado de El Rayo, los productores tienen que vender sus becerros a mitad de precio prácticamente.
Por su parte, la Sagarpa a través del titular del Distrito de Riego 06, Jesús Antonio Villagrán, dio a conocer que la “brusella abortus” tiene una afectación más bien económica, porque la sintomatología que desarrolla es que genera muchos abortos en el último tercio de la gestación, lo que disminuye notablemente las pariciones que es finalmente el negocio de la producción.
Además, esta infección se transmite por contacto humano aunque no por consumo de la carne, ya que el organismo de los becerros se afecta únicamente en el aparato reproductor. Inclusive aquellos animales que sean para producción lechera también aprovechan este producto porque finalmente es pasteurizado.