Gobernador tarahumara pide que no haya discriminación
Planea una feria artesanal mensual con apoyo del Ayuntamiento
CUAUHTÉMOC, Chih.- Isidoro Rivera, el líder colono de los tarahumaras en Ciudad Cuauhtémoc, observa con atención cómo se desarrolla el Festival de Artesanías Sekáti Newárame (Hecho a mano) que se lleva a cabo en el centro de la ciudad. Mira orgulloso a su gente, la cual muestra a la comunidad algunos rasgos de su cultura, como la alimentación y la vestimenta, la herbolaria y las artesanías.
“Este evento es más bien como una convivencia para mezclar todos los colores, para que no haya discriminación; por ello queremos que esta fiesta se realice por lo menos una vez al mes, a ver qué nos responden las autoridades, porque falta apoyo, sí nos falta apoyo”, dice mientras saluda a quienes se le acercan.
“Queremos que nos conozcan, que sepan lo que hacemos y lo que somos. Mucha gente piensa que nosotros, por ser tarahumaras, no hacemos algo bueno en esta vida, ¡pero claro que lo hacemos!; en la colonia tenemos gente mucho muy trabajadora, que lucha por salir adelante”, agregó.
Para los tarahumaras el recuerdo y el reconocimiento a los antepasados en de gran valor. El señor Rivera resalta uno de los principales deberes de su gente: no olvidar de dónde se viene y para qué, lo cual se manifiesta en cada día de su vida.
Según él, entre los mestizos hay fuertes críticas a los tarahumaras, diciendo que es gente que no trabaja y que además son muy borrachos. “Pero tenemos lo mismo, ¿no?; también entre los blancos hay borrachos, y por ello pido que no se nos critique así, que no se haga discriminación”.
Asegura el líder de los rarámuris en Cuauhtémoc que va a invitar a los menonitas para que participen en sucesivos festivales organizados por la colonia Rayénari, porque es una región Isidnrteorc Ruivlteurra, lgyoebl si se trata de combatir la discriminación, pero con el apoyo de las autoridades.
Rivera voltea a ver de reojo los pasillos de la plaza principal y lanza una queja en tono de pregunta: “¿Cómo pueden venir de otros estados y poner carpas en la plaza durante semanas, y a nosotros no nos apoyan, a nosotros que somos el pueblo ancestral de Chihuahua, junto con pimas, guarijíos y tepehuanos? Estamos pidiendo algo de lo que nos deben, nada regalado”.
Dijo que lo que se está pidiendo a todos los habitantes del estado es respeto a las etnias, de las cuales “deberíamos sentirnos orgullosos”. Manifestó su extrañeza ante expresiones como: “Yo soy chihuahuense, pero no creo en los tarahumaras”.
Advierte también, de manera serena, sobre el lenguaje que en el contacto con los blancos o mestizos. “Yo quisiera que todos nos respeten, que nos tomen en consideración; porque hay personas que lo ven a uno chiquito y le dicen: ‘Quióbole compadre’, siendo que ‘compadre’ se dice para hacerlo ver a uno más chaparrito, y eso no debe ser porque todos somos iguales”.