Falta de empatía hacia los demás
Algunas personas son una luz
en nuestro camino, mientras que otras se ponen oscuras y entumecen nuestro recorrido. Al mismo modo, existen personas que harían lo inimaginable por nosotros y otras que no moverían un dedo a causa de su falta de empatía.
Cada uno de nosotros se relaciona de modo diferente en cada contexto. Por consiguiente, hay relaciones que enriquecen nuestro camino y otras que no lo hacen; este últimas se averiguan generalmente por falta de empatía. ¿Les ha ocurrido de tener a qué hacer con personas que no aceptan que cometan errores? ¿Les han relacionado con personas que no tienen en consideración sus pensamientos y sentimientos? Se trata de personas carentes de empatía, a las cuales no interesa meterse en os zapatos de los demás.
La empatía es la capacidad de comprender el punto de vista del otro, percibiendo y siendo conscientes de sus sentimientos. Algunas personas, en cambio, no cuentan con esta calidad. Hablamos de ello en este artículo, de cuáles molestias pueden ser asociados con la falta de empatía y cuál es el modo mejor de relacionarse con estos sujetos.
Menos una persona es empática, menos amigos tienen; meterse en los zapatos de los demás ayuda a crecer como personas y a hacer florecer nuestras relaciones.
Las personas poco o para nada empáticas no cuentan con la capacidad o con el interés de comprender y percibir los sentimientos ajenos. Estas personas no logran:
Preocuparse por los otros. No hacen caso, porque son concentrados en ellos mismos o porque no les importa lo que ocurre a los demás.
- Sensibilizarse. A pesar de que les cuenten sus
pensamientos y sentimientos, no enseñan interés en percibir y comprender lo que les sucede.
- Tener confianza. No percibiendo de veras los pensamientos y los sentimientos ajenos, las personas carentes de empatía no logran echar las bases por una relación basada en la confianza.
- Creer en los sentimientos ajenos. Dudan de las emociones ajenas, y por este se muestran frías.
- Probar compasión. No son motivadas a aliviar el dolor o el sufrimiento de las otras personas.
Tiernas a mente estas características podrán ayudarle a reconocer quién de sus conocidas falta de empatía. Consideraran que cualquiera relación prevé matices, algunas personas son poco o muy empáticos.
PERSONAS CARENTES DE EMPATÍA, PERSONAS EGOÍSTAS
Las personas carentes de empatía no se meten en los zapatos ajenos. Por este motivo, descuidan de ellas los sentimientos y los pensamientos. Una de las características de mayor relieve en las personas poco empáticas es el egoísmo.
Pueden ser muy egoístas, ya que piensan en el propio bienestar y subvaloran las necesidades ajenas. Aprovechan, pues, de cada situación para conseguir beneficios y ventajas. En otras palabras, usan los otros.
Además, exasperan la exigencia de reciprocidad de las relaciones: dan solo si reciben algo en cambio. Nunca proveen informaciones de modo desinteresado. Se relacionan con un objetivo, una utilidad, haciendo de la manipulación un estilo de vida.
La falta de empatía puede hacernos aparecer las personas frías, ya que con ellos hemos vivido situaciones desagradables, nos hemos sentido poco incluidos porque sólo piensan en su bienestar. Se trata de personas poco amigables, que no ligan con los demás.
MOLESTIAS ASOCIADAS A LA FALTA DE EMPATÍA
Todo podemos estar a veces carentes de empatía. Sin embargo, algunas personas lucen esta característica como un estandarte. Algunas molestias psicológicas son conectadas estrechamente a la falta de empatía:
Trastorno narcisista de la personalidad. Estas personas son egocéntricas, se preocupan de modo extremo por ellas mismas ignorando los otros. Su falta de empatía provoca este trastorno de personalidad que le impide a la persona de ver más allá de sí mismo.
Psicopatía. La persona no logra conformarse con las normas sociales y le resulta complicado entrar en sintonía con los otros.
Trastorno bordelinde de personalidad. La persona presenta inestabilidad emotiva, motivo por que le cuesta mantener relaciones estables. Tiene grandes dificultades a comprender y predecir como los otros se sienten.
Cuando se esfuerzan de explicarles a estas personas el porqué de sus malsanas relaciones, no logran entenderlo y pueden hacer sentir en culpa buscando de cambiar los echos y afirmando que hemos sido nosotros a sernos comportado mal. Tengan cuidado, la falta de empatía puede causar mucho dolor en quien la experimenta.
¿CÓMO AFRONTAR A LAS PERSONAS CARENTES DE EMPATÍA?
Algunas personas carentes de empatía no sólo le costa entender los otros, sino las manipulan para conseguir lo que desean. Algunos consejos para afrontar personalidad de este tipo:
- Poner límites. No tenemos que permitir a nadie de superar los límites.
- Elegir bien a los amigos. Si una persona piensa sólo en sí mismo, no la elijamos como amista. Sólo nos causará malestar.
- Ser asertivo. Comunicar en el más buen modo posible los mismos sentimientos.
- Alejarse si no se advierte conexión emotiva. Si no percibimos que hay conexión entre nuestros pensamientos y sentimientos con los de la otra persona, es mejor alejarnos; podríamos tener en frente una persona carente de empatía.
Los extremos no hacen nunca bien. A veces podemos equivocarnos y sólo ver nuestros intereses, pero eso no significa que no somos empáticos. La cosa importante es saber elegir cuáles personas tener cerca y en cuál reponer nuestra confianza. De este modo sabremos sobre quien poder contar en los momentos difíciles.
Las personas carentes de empatía son desinteresadas de veras a los demás. No logran meterse en nuestros zapatos para comprender lo que probamos y pensamos. No ven más allá de su mundo y quedan, de este modo, en su zona de confort.
Escapen de las personas que dan vueltas a sus argumentaciones para hacerles sentir en culpa. Sólo tratan de llevar todo a su favor para conseguir lo que desean. Son personas manipuladoras y frías, que no expresan de modo sincero los propios sentimientos, ni comprenden la situación que están viviendo.