EL CEREBRO Y SUS CUIDADOS ALIMENTICIOS
Dejar de hacer algunas de las principales comidas del día y la desorganización de los horarios que marcan el momento de comer son también factores a tener en cuenta. Así como la malnutrición puede favorecer la aparición de la migraña, la falta general de alimento durante muchas horas seguidas también es capaz de producir el mismo efecto.
Por ejemplo, se estima que el ayuno prolongado produce dolores de cabeza frecuentes en aproximadamente un 15% de las personas que practican habitualmente este hábito. Haz entre cuatro y cinco comidas al día y asegúrate de que en tu horario no se cuelen momentos de ayuno durante horas. Así, serás capaz de mantener unos niveles estables de glucosa en la sangre y evitarás entrar en el estado de hipoglucemia. Ahora bien, procura no caer en el extremo contrario y evita los atracones.