Panismo de Cuauhtémoc muestra apoyo a Maru
Líderes cierran jornada con cordialidad y declaran que todos son panistas
CUAUHTÉMOC, Chih.- Una jornada en calma, de respeto y participativa se vivió en el ámbito local en la elección del candidato a la gubernatura del Partido Acción Nacional, donde Maru Campos triunfó con 150 votos, contra 122 de Gustavo Madero.
En total fueron 272 votos. En el Salón Cibeles, donde se realizó la jornada, esperaban 300 militantes: 275 de Cuauhtémoc y 25 o 30 de Cusihuiriachi.
Al concluir, liderazgos de Cuauhtémoc como José Alfredo Pacheco y Miguel López, que estaban a favor de Campos, así como Saúl Mireles y Saúl Palma, quienes apoyaron a Madero, chocaron puños al estilo de saludo Covid, luego de pronunciar que todos son panistas y se sumarían a partir de hoy a un mismo proyecto, el de María Eugenia Campos Galván.
Durante la jornada, la única irregularidad fue que al menos una veintena de militantes tuvieron que regresarse a sus casas sin emitir su sufragio, debido a que no aparecieron en las listas de registro.
El primero en protestar abiertamente fue Andrés Barba, panista desde 1985, quien ha contendido por diversos puestos de elección popular y ha sido dos veces presidente del Comité Municipal del PAN.
Al cuestionarle a qué atribuía no aparecer en el listado, expuso que al Comité Estatal del PAN, debido a que expresó su apoyo a Maru Campos, a quien incluso dio su firma.
Como él otros panistas llegaron y les comunicaron uno a uno: “es que usted no refrendó, por eso no aparece”. Una mujer comentó que en alguna ocasión le llegó un escrito con un listado que decía que si su nombre aparecía en él o era panista de muchos años, no tenía necesidad de refrendar. Ella leyó ahí su nombre y omitió hacer el proceso, tal como se le indicó, razón por la que confió en alistarse ayer para acudir a votar, topándose con la sorpresa de no estar afiliada.
No obstante, la jornada continuó tranquila, pues nadie se exasperó por estas u otras circunstancias. Por lo contrario, se vivió un ambiente de cordialidad, aunque en preferencias permanecían divididos.