"El Favela", testigo clave en masacre
Intentó escapar a los Estados Unidos después del multihomicidio de 2019, pero fue detenido; su colaboración ha permitido detener a 20 involucrados
Días después de la masacre de la familia LeBarón (4 de noviembre de 2019) en los límites de Chihuahua y Sonora, un sujeto a quien apodan el Favela escapó del estado e intentó cruzar a los Estados Unidos para evitar sospechas por estos hechos, sin embargo, fue capturado por las autoridades norteamericanas y se convirtió en un testigo colaborador que ha facilitado la ubicación de más de 20 presuntos pistoleros, incluidos el Mudo o el 32.
Así lo dio a conocer el activista y familiar de las víctimas, Adrián LeBarón, quien explicó que gracias a la colaboración del testigo que se encuentra asegurado en Estados Unidos es que han podido realizar detenciones de criminales ligados a la masacre de la familia, siendo el último de ellos Wilbert M.L. el Parka, quien el pasado 17 de febrero fue vinculado a proceso por un juez federal.
El Favela ha aportado datos claves de la estructura de la organización, el recuento de los hechos y las identidades de quienes estuvieron en estos hechos, lo cual ha sido informado a las autoridades norteamericanas y posteriormente comunicado a las autoridades mexicanas para completar las respectivas investigaciones.
En una audiencia de seis horas consecutivas, la juez federal decidió vincular a proceso a Wilbert por su participación en la masacre de la comunidad LeBarón, esto de acuerdo a la evidencia que logró presentar la Fiscalía General de la República (FGR) en su contra como fue números de celular, testimonio de compañeros y reconocimiento por parte de los afectados.
“La Parka fue quien llevaba la cuadrilla de pistoleros, así se llamaban, parece que estaban al mando de Roberto el Mudo, pero el Mudo no estaba en el lugar él es autor intelectual, pero la Parka sí estaba en los hechos e incluso fue quien dio la orden de prenderle fuego a la camioneta”, refirió.
El Favela ha sido pieza clave para la reconstrucción del caso, ya que al encontrarse el día de los hechos reconoce y sabe que fue lo que verdaderamente ocurrió el día de la masacre, y también ha asegurado que todo se salió de control, al confundir a la familia LeBarón en los hechos.