Reforma Eléctrica, ¿avance o retroceso?
Esta semana el norte del país y diversas entidades del país han sufrido cortes de energía eléctrica, algunos por más de dos días, originada en parte por la falta de gas natural en las plantas generadoras de la Compañía Federal de Electricidad (CFE) debido a la falta de previsión y de una cuestionable administración de la Empresa al no prever las variaciones de los precios del gas natural, ni planear, lo cual ha afectado a la industria manufacturera, servicios, comunicaciones generando grandes pérdidas económicas.
Este lamentable contexto nos hace reflexionar acerca dela iniciativa preferente presentada el primero de febrero de 2021 por el titular del Ejecutivo Federal por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley de la Industria Eléctrica.
En dicha iniciativa el Ejecutivo Federal pretende que exista una prelación en el despacho de las centrales eléctricas dando preferencia a las Hidroeléctricas y plantas de generación de la CFE y en último lugar a las generadas por energías limpias como la eólica, solar, y ciclo combinado de empresas privadas; Asimismo, la posibilidad de revocar permisos de autoabastecimiento; Ampliar la emisión de Certificados de Empresas Limpias; Eliminar la subastas de cobertura eléctrica; y revisión de contratos de compromiso de capacidad de generación de energía eléctrica y compraventa de energía firmados con Productores Independientes de la Energía, pudiendo ser renegociados o rescindidos cuando no sea rentables para la Federación.
De los primeros análisis realizados a las propuestas del Ejecutivo Federal observamos temas que son preocupantes, toda vez que introduce elementos de incertidumbre jurídica, retrocesos en la competitividad del sector y el desarrollo e implementación de tecnologías y uso de energías limpias para la generación de energía eléctrica. En adición que en su exposición de motivos parte de premisas erradas y medias verdades.
El Ejecutivo Federal argumenta que CFE esta fracturada, casi en ruinas, la realidad es que CFE es una empresa rentable, como ejemplo de ello, en 2019, su utilidad consolidada fue de 45,019 millones de pesos. Ha sido rentable en transmisión y distribución, toda vez que tiene la exclusividad, en suministro su utilidad fue de 32,706 millones de pesos, en donde están sus áreas de oportunidad es en la generación de electricidad.
El Ejecutivo pretende regresar de manera disfrazada a un monopolio del Estado en todas las fases del sector eléctrico (generación -53%-, trasmisión y distribución -100%- y suministro -76%-), introduciendo a la Ley elementos que distorsionan el mercado y sobre todo, introducen factores que ponen en desventaja a quienes pretendieran invertir en el sector eléctrico. Lo cual nos lleva a preguntar, si el Estado será capaz de cubrir la demanda creciente y del número de usuarios, que de 2012 a 2108 aumentó un 18%.
Es una iniciativa que debe ser analizada colocando los intereses de la nación sobre los intereses ideológicos del Ejecutivo Federal, máxime que las actividades económicas absorben el 75% del consumo total, la actividad económica es la que genera empleos, distribuye la riqueza nacional, cubre el presupuesto público con los impuestos que paga; La propuesta del Ejecutivo atenta contra la generación de electricidad, al pretender inhibir la competencia en generación, al proponer que primero se compre la energía a CFE, sin importar su costo de producción, ni que una parte importante es generada mediante el uso de energía fósiles (contaminantes).
En los últimos años el sector privado ha invertido más de 44,000 millones de dólares en generación de electricidad. Lo que el Ejecutivo Federal no dice, es que al ser los privados quienes tienen un menor costo de producción, el precio de venta de la energía a CFE es menor que el costo de producción de CFE (En 2020 la Comisión Reguladora de Energía informó que el costo total de la energía producida por CFE fue superior en un 26% a la generada por los Productores Independientes de Energía y un 252% mayor al costo de generación obtenido en la subastas a largo plazo). Qué pasará con los precios de la energía eléctrica con la propuesta del Ejecutivo si se da preferencia a la compra de energía de CFE, un primer escenario es un aumento en el precio de la energía para quienes somos usuarios o bien, un aumento en los subsidios, lo que elevaría el costo para el Estado, en ambos escenarios, México pierde.
Estamos ante una iniciativa que no beneficia ni a los usuarios, ni a la CFE, ni al medio ambiente, como tantas otras propuestas del Ejecutivo, sólo pretende satisfacer su alter ego y un nacionalismo mal entendido. Va en contra de los postulados de Lázaro Cárdenas al crear la CFE en la que la generación, trasmisión y distribución se basaran en principios Técnicos y Económicos con la finalidad de obtener energía al menor costo y reducir el precio del suministro eléctrico para los mexicanos.