¿Regular las redes sociales digitales?
Recientemente el senador Ricardo Monreal, dio a conocer la propuesta de regular las redes sociales en el país y el proyecto de iniciativa se encuentra ya en su sitio web; https://bit.ly/RegulacionRedes. Se invita a la ciudadanía a descargar el documento y si se tienen dudas o comentarios, hay un apartado en el que se pueden escribir para ser respondidas.
La justificación de dicha iniciativa, resulta de la posición del gobierno mexicano en contra del bloqueo de cuentas en redes sociales, del expresidente de Estados Unidos Donald Trump; por los sucesos en el Capitolio en el que infortunadamente fallecieron cinco personas y hubo varios heridos. El exmandatario, a través del famoso sitio de microblogging, justificó los hechos y calificó a los perpetradores como "patriotas". Lo que provocó que las redes sociales, dejaran de servirle como su altavoz. Entre lo más destacable de la iniciativa, se pretende controlar todos los servicios que se ofrecen por medio de un organismo público, y de aprobarse se estarían burocratizando las redes sociales y el internet, y se restringiría su carácter global.
Otro punto a resaltar es el de facultar al Instituto Federal de telecomunicaciones (IFT), como regulador de las operaciones que se realizan a través de los algoritmos de cada red, pretendiendo que estas sean revisadas y aprobadas por dicho instituto, sin considerar el incontable número de acciones que son ejecutadas diariamente, por medio de los procesos de inteligencia artificial. El comercio digital de nuestro país, también se estaría afectando, al imitar las ventajas que las redes sociales ofrecen gracias a la gran comunidad digital que las conforman, entre ellas: el alcance, la rapidez, la visibilidad y la viralidad, de productos y/o servicios.
Facebook y Twitter, como cualquier otra empresa privada en este u otro país, tiene el derecho de decidir a quién o quiénes prestan sus servicios, de qué modo y para qué. Es imposible forzar a una compañía a que ajuste sus políticas por decreto gubernamental. Recordemos también que tienen un elevado rol en las campañas políticas —ciberpolítica— y por lo tanto en los próximos procesos electorales de junio del año en curso. La sociedad digital no puede estar restringida por una serie de disposiciones de los gobernantes, porque eso sí, sería sin lugar a duda; un atentado contra la libertad de expresión.
Hasta el momento la propuesta ha recibido severas críticas por parte de expertos y es que parecieran una serie de galimatías que dejan al descubierto un claro desconocimiento y que tras una aparente defensa de la libertad, se traduce en lo contrario.