Javier Félix Muñoz
“El gobierno debe ser simple y útil”: José Martí Escritor, filósofo, político cubano-latinoamericano (1853-1895)
Pintarrajear monumentos históricos de héroes patrios, apedrear el Palacio Nacional o de los gobiernos de los estados, quebrar vidrios, cerrar calles, carreteras, bloquear edificios o en casos extremos, aventar bombas molotov contra edificios y/o policías son medidas extremas de protesta, desgraciadamente muchas veces, por no decir casi siempre, es la única vía que hasta la fecha el sistema político mexicano nos deja a los ciudadanos para asegurar que nos atiendan en tiempos difíciles, y en raras ocasiones nos resuelvan diversos problemas, esta antigua costumbre
El sistema político vigente es: presidencialista, centralista, de administración pública burocratizada en exceso, fue heredado por la 4T producto de la historia mexicana de la Revolución para acá.
debe terminar en un gobierno como el de la 4T, que desea ser diferente.
Pasar de la protesta con diversos grados de violencia a la propuesta civilizada y democrática es un tema urgente.
El sistema político mexicano vigente es: presidencialista, centralista, de administración pública burocratizada en exceso, fue heredado por la 4T producto de la historia mexicana de la Revolución para acá, con presidentes del PRI (15 en sus diferentes versiones, Nacional Revolucionario, de la Revolución Mexicana y Revolucionario Institucional) y del PAN (2). En su forma de gobernar fueron más o menos lo mismo con ciertos matices más de forma que de fondo.
Para que sea posible pasar de la protesta violenta anárquica a la propuesta pacífica democrática es necesario no sólo un cambio de actitud entre la ciudadanía, sino que es indispensable que el gobierno en sus diferentes instancias: federal, estatal y municipal, y los diferentes poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial, mediante los cambios constitucionales y leyes secundarias que se requieran, establezcan formas institucionales en que la ciudadanía tenga la posibilidad real de expresarse en forma democrática, para obtener en un tiempo racionalmente breve, soluciones a sus justas demandas.
Un gobierno que se aprecia de ser diferente como el de la 4T, en algún momento, espero que no lejano, tendría que presentarnos un programa eficiente de simplificación administrativa real, para ver al gobierno como un aliado, no como un obstáculo.
En nuestro estado, de acuerdo al segundo Estudio sobre la Demografía de los Negocios (EDN 2020), publicado el 22 de marzo por el Inegi, el número de negocios tanto informales como formales registrados hasta 2019 era en números redondos de 128 mil, la pandemia y otros factores hicieron quebrar 26 mil negocios, micro, pequeños y medianos.
Los candidatos a Gobierno del Estado, los candidatos a presidentes municipales, diputados federales y estatales, ¿qué propondrán para que estos negocios quebrados se reactiven? Para generar empleo, salarios, impulso a la actividad económica.
Urgen medidas extraordinarias para enfrentar la mayor crisis económica de los últimos 100 años.
No se requieren mejorales, urge cirugía mayor, entre otras cosas, simplificar los trámites burocráticos, por ejemplo, con frecuencia un departamento de una dependencia, ya sea municipal, del estado o federal, nos exige documentos, permisos, que otro departamento de esa misma dependencia tiene en su poder.
La burocracia tal como está diseñada actualmente, más que agilizar retrasa, más que resolver complica, más que ahorrar encarece, está más diseñada para robar por corrupción que para solucionar problemas de la ciudadanía.
En una 4T verdadera, eso ya no es admisible.
¿Algún diputado local o federal tomará en cuenta estas propuestas?