Violadores pueden estar en la familia
En febrero de 2021 se registraron 38 incidentes de abuso sexual, 5 de violación equiparada y 12 de violación simple, reportó Ficosec
"No quiero que me vuelvas a tocar, le voy a decir a mi mamá y a mi papá”, fue lo que Benyi Torres le gritó a su primo, su agresor sexual por más de seis años. Ahora tras muchas terapias y un proceso de enfermedad narra la situación que muchas veces se oculta por miedo y vergüenza. Hace un llamado a las familias para que cuiden a sus niños y niñas.
De acuerdo al reporte de incidencia delictiva de Ficosec, en el municipio de Chihuahua en febrero de 2021 se registraron 38 incidentes de abuso sexual, 5 de violación equiparada y 12 de violación simple. Un delito que se oculta debido a que la mayoría de los agresores son miembros de la familia.
Benyi tras sufrir violaciones reiteradas en la infancia necesitó un proceso que duró años para sanar, ahora lanza una alerta para que las familias cuiden a sus niñas y niños, que no sean atacados ni por un familiar.
Desde los cuatro años y hasta los diez fue víctima de violación. Su madre la llevaba a casa de su tía, hermana mayor de la madre, quien tenía una tienda de ropa, mientras ellas se entretenían en el negocio, su primo de 14 años la violaba. Luego le daba un dulce de pay de limón, como recompensa a su silencio.
“Fue doloroso, implica muchas cosas, te daña emocional y físicamente”, declara esta mujer, quien además fue víctima de agresión psicológica.
Denunciar los delitos sexuales se convierte en una tarea compleja para las víctimas, ya que es en la mayoría de los casos en el contexto familiar o cercano en el que ocurren los incidentes.
Según la Encuesta de Prevalencia de la Violencia Familiar y Sexual en el estado de Chihuahua impulsada por el Observatorio Ciudadano de Ficosec en 2019, el 1.4% de quienes fueron encuestados dijo haber sido víctima de violencia sexual; de este total, el 82% fueron mujeres las afectadas. El 8.6 declaró haber vivido violencia sexual.
Benyi tras sufrir violaciones reiteradas en la infancia necesitó un proceso que duró años para sanar, ahora lanza una alerta para que las familias cuiden a sus niñas y niños de cualquier abuso