"Se trata de ataques certeros, terrorismo"
Tras el asesinato de Abel Murrieta, el activista afirma que buscarán a un nuevo abogado que pueda dar continuidad a la investigación por la masacre de la familia
Tras el asesinato del abogado Abel Murrieta, del 2019 al 2021 la familia LeBarón había documentado más de 20 detenciones en las que participó de forma jurídica para asegurar que los involucrados permanecieran en prisión por haber cometido la masacre de los LeBarón en los límites de Sonora y Chihuahua.
Adrián LeBarón reconoció la participación que había tenido el también candidato a la Alcaldía de Cajeme, ya que aseguró ser una persona intachable y que no se habría “rajado” si hubiera llegado al poder y que posiblemente ese fue el motivo por el cual decidieron privarlo de la vida, ya que no permitiría más el control de los grupos criminales. El activista Adrián LeBarón aseguró que los ataques en contra de su hija, como de su abogado Abel Murrieta, no son ataques fortuitos, sino que se trata de ataques certeros y dirigidos en contra de ellos, y que todo se enmarca en las disputas por los controles de un grupo de terroristas en México. Aseguró que seguirá presionando para detener a todos los responsables de haber participado en la masacre de la familia LeBarón y ahora pedirá justicia por su amigo Abel Murrieta, quien aseguró causaba “peso” a los criminales, porque él no se iba a doblegar como funcionario público en Sonora.
En dos semanas dijo que viajará a la Ciudad de México para pedir justicia por la vida de su abogado y amigo, así como espera que pueda gestionar un nuevo abogado que le pueda dar continuidad a la investigación por la masacre de la familia LeBarón para continuar con las audiencias y demás cuestiones jurídicas. “En Estados Unidos estamos viendo una serie de asuntos civiles, reparación de daños, entre otras circunstancias, esto tiene que llegar hasta tribunales internacionales, pero primero debemos terminar con las instancias mexicanas para seguir escalando y pedir la justicia que a todos nos hace falta”, comentó. Adrián LeBarón explicó que en el caso del candidato Abel Murrieta se debe a lo mismo que se ha generado por años en México, que es la disputa de control de espacios entre criminales, como sucede en Sonora y aparentemente sucedió en los límites de Chihuahua al momento de que se generó la masacre en contra de mujeres y niños de la comunidad LeBarón.
“Ellos en los caminos es donde están al pendiente, no quisieron perder la plaza, si gana Murrieta perdemos la plaza, como hablamos de plazas, es lo que peleaban, como mataron a Abel Murrieta, no murió en un fuego cruzado entre criminales, mi hija tampoco, fue un ataque artero, porque andan tras el control de la plaza y nadie hace nada”, añadió. Reconoció que su abogado y amigo no se iba a dejar vencer por los grupos criminales en Sonora, y que por ellos decidieron matarlo, “en Chihuahua está igual, no te puedes meter a Ignacio Zaragoza, Largo Maderal, son lugares peligrosos, han matado suficiente gente para que esté el pánico vivo”.
El activista y representante de la familia LeBarón comentó que la gestión para que las células criminales en México sean consideradas terroristas de la nación sigue caminando con las autoridades norteamericanas, para poder obtener la colaboración de las dos naciones para combatir estas agrupaciones criminales.
“Nos hizo un favor Donald Trump, al decir que lo iba a hacer, fue una noticia nacional e internacional, pero nunca lo terminó, estamos con el nuevo presidente Biden, pero creemos que no les conviene hacer algo así, por el tema de los acuerdos bilaterales, pero lo vamos a llevar a cortes internacionales”, señaló Adrián LeBarón.
Desde la masacre de la familia LeBarón, ocurrida en noviembre de 2019, las autoridades federales le sugirieron contratar al abogado Murrieta para llevar el caso, por lo cual hasta el día de su fallecimiento había participado en temas jurídicos para la detención de al menos 14 personas. Entre los presuntos responsables de haber participado en los hechos se encuentra el líder criminal de la región noroeste del estado de Chihuahua, Roberto G.M. el Mudo.