Carlos Esparza Deister
El sábado me dirigí a Antena Radio para asistir a nuestro programa, Los Editorialistas, que se transmite a las tres de la tarde, ya estando en cabina llegó a la cita el primer invitado, Fernando Tiscareño, candidato a diputado federal del Distrito 8 por Morena, luego arribó mi compañera de la Asociación de Editorialistas de Chihuahua, María de los Ángeles Ruiz, e inició el programa.
Tiscareño es un abogado de 45 años, que comenzó su carrera política, como funcionario en el sexenio de Vicente Fox, más tarde estuvo en el Ayuntamiento de Marco Quezada, luego buscó sin éxito la Alcaldía chihuahuense por Morena y ahora desea ser diputado federal por el mismo partido.
Antes del primer corte comercial, recalcó los logros alcanzados durante la administración priista de Quezada, entonces una radioescucha cuestionó por qué retirarse del PRI, si se supone hizo varias cosas positivas, además le reprocharon que mencionara a López Obrador en su discurso, pues consideraban era una mala publicidad. Tiscareño respondió con un, “Respeto su opinión, pero no estoy de acuerdo con ella”.
Luego de la segunda pausa, señaló que ha sido muy bien recibido en las colonias pertenecientes a su distrito, durante esas visitas han detectado graves carencias de agua, donde muchas personas se bañan a jicarazos, mi compañera comentó que todos en algún momento lo hemos hecho, respondiendo que efectivamente, pero no todos los días y en pleno siglo XXI. Al mandar a otro corte vi llegar al otro candidato que entrevistaríamos, Jesús Ernesto Visconti, también candidato al Distrito 8, pero por Movimiento Ciudadano, y quien hace unos meses renunció a Morena por diferencias con Juan Carlos Loera.
La primera media hora se fue volando, casi al finalizar la entrevista con el candidato morenista comenté que se palpa en las calles una gran molestia de la gente con la política en general. Basta observar en los cruceros, donde decenas de “simpatizantes” ondean sus banderas y al acercarse a los autos son ignorados, sin importar a qué partido pertenecen, muchos prefieren no bajar el vidrio, rechazan la calcomanía, pluma y hasta tapabocas. Fernando dijo que se comprometía con resultados a quitar esa mala imagen. Se despidió y durante la pausa apareció Ernesto Visconti, acompañado de su suplente, Velia Monge, los candidatos se dieron un afectuoso abrazo y luego Tiscareño abandonó la cabina.
Visconti es un empresario de 51 años, que ha ingresado a la política, dicho por él mismo, con el fin de ayudar a la comunidad, quien también señaló que durante su campaña encontraron decenas de colonias con deficiencias en drenaje y agua principalmente, entonces, apoyado por miembros de su partido, a través de un amparo, exigieron a las autoridades municipales se garanticen servicios básicos en más de 170 colonias de nuestra ciudad, y se logró, pues aseguró que ya fueron notificadas varias dependencias involucradas, que deben iniciar trabajos, para proveer dichos servicios. Casi al finalizar el programa, Ernesto Visconti presentó su prueba antidoping de cabello, con resultados negativos, e invitó a todos los aspirantes a cargos públicos de Chihuahua para realizársela.
Durante el camino de regreso a casa fui observando los innumerables espectaculares de candidatos sonrientes, otros con cara de perdonavidas o aparentando rudeza. Dinero de los ciudadanos tirado a la basura, pues luego de que varios de ellos ganen las elecciones no finalizarán su gestión, abandonarán el cargo que el pueblo les confió, para ir en búsqueda de un hueso más grande.