Inicia INAH trabajo de rescate rupestre
Este sitio está declarado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) llevará a cabo trabajos de restauración, rescate y conservación en la Cueva de las Monas, la cual a partir de las representaciones, formas y colores que alberga constituye un ejemplo representativo y singular del arte rupestre no sólo del estado de Chihuahua, sino del norte de México.
Un estudio reciente que llevó a cabo el arqueólogo Enrique Chacón, por parte de esta dependencia, dio a conocer que no hay evidencia sólida para considerar la presencia de apaches en esta zona, asimismo, gracias al recurso económico entre el INAH y el Municipio fue posible realizar esta intervención, en una primera etapa, que fue en el mes de mayo; ahí participaron cinco especialistas del instituto del Área de Restauración y Conservación Integral.
Este sitio, declarado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, contiene más de 300 asombrosas manifestaciones gráfico-rupestres que originalmente se pensó fueron elaboradas durante tres etapas pictóricas (arcaico, colonial y apache); dada la importancia patrimonial de Cueva de las Monas, y ante el deterioro que sufren sus pinturas, el Programa Nacional de Conservación de Patrimonio Gráfico-Rupestre (Pncpgr) del INAH ha estimado la necesidad de trabajar durante otras cuatro temporadas anuales, de aproximadamente 30 días cada una.
“Nosotros equiparamos la profesión de los restauradores con la de los médicos: Nuestro paciente en este caso es el patrimonio cultural. La primera parte que hacemos es el diagnóstico, como si fuera una historia clínica, para ver cuáles son sus problemas, sus enfermedades. En este caso tenemos deterioros que se han sumado con el paso del tiempo, por el intemperismo y por la huella de los visitantes”, expresó Sandra Cruz Flores, restauradora
perito, responsable del Pncpgr.
Debido a lo anterior, el Ayuntamiento de Chihuahua, por medio de la oficina de Patrimonio Cultural, la cual es encabezada por Francisco Barrio Mirazo, desarrolla programas educativos de concientización con los visitantes para que acudan de manera respetuosa y ayuden a conservar el sitio arqueológico, de ahí la necesidad de impulsar un proyecto para la Cueva de las Monas en su totalidad.
El sitio arqueológico fue reportado en la segunda mitad de la década de 1980, época en la cual se llevaron a cabo los primeros estudios sobre la historia cultural de los componentes del sitio