Multinacionales pagarán 15% de impuesto global
Ministros del G20 aprobaron oficialmente el histórico acuerdo con el fin de acabar con los paraísos fiscales
“Se trata de una nueva arquitectura de la tributación para el siglo XXI” BRUNO LE MAIRE MIN. DE ECONOMÍA DE FRANCIA
VENECIA. Los ministros de Finanzas y los gobernadores de los bancos centrales del G20 aprobaron el mecanismo sobre fiscalidad para multinacionales consensuado el 1 de julio en el marco de la OCDE, y ahora se centrarán en convencer a los países que aún muestran reticencias para que se sumen.
En la Unión Europea (UE), Irlanda, Hungría y Estonia, que han atraído durante años la inversión privada por sus tipos tributarios bajos, han mostrado sus dudas para adherirse a este mecanismo, pero el ministro italiano confió en que “cambien de opinión” porque, dijo, los países del G20 representan alrededor del 90 por ciento del producto interior bruto mundial y esto “es una presión para el resto”.
El G20 aprobó así el acuerdo “histórico” para la imposición de un impuesto a las multinacionales, con el objetivo de poner fin a los paraísos fiscales y que deberá entrar en vigor en el 2023.
Se trata de un acuerdo para una arquitectura tributaria internacional “más estable y más justa”, que establece un impuesto global de “al menos el 15 por ciento” sobre las ganancias de las multinacionales, según indicaron a fuentes cercanas a las negociaciones.
“Se trata de una nueva arquitectura de la tributación para el siglo XXI. Es una excelente noticia para todas las naciones del planeta”, adelantó entusiasta a la prensa el ministro de Economía de Francia, Bruno Le Maire.
También la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellena, reaccionó positivamente, e instó al mundo a “finalizar rápidamente el acuerdo”, que deberá transformar la arquitectura tributaria mundial. Se trata de imponer un impuesto global de “por lo menos el 15por ciento” a las empresas para combatir los paraísos fiscales y para que las compañías tributen donde obtienen ingresos.
Un big bang fiscal, cuyas normas se irán perfilando de aquí a octubre, deberá empezar a aplicarse en el 2023. “Es una jornada histórica”, reconoció el comisario europeo para la Economía, el italiano Paolo Gentiloni, tras elogiar que se ponga fin a la carrera por el impuesto más bajo.
Los países que representan el 85% del PIB mundial quieren gravar de forma justa a los gigantes digitales que evaden en gran medida los impuestos.
Varios miembros del G20, como Francia, Estados Unidos y Alemania, hicieron campaña por una tasa superior al 15%, pero se descartan cambios hasta la próxima reunión de los 19 países más ricos del mundo y la Unión Europea en octubre.
Pero varios miembros del grupo de trabajo de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) que alcanzaron un acuerdo de principios el 1 de julio, como Irlanda o Hungría, siguen sin dar señales.
Irlanda aplica una tasa del 12.5 por ciento desde 2003, muy baja en comparación con otros países europeos, lo que le ha permitido albergar las sedes europeas de varios gigantes tecnológicos como Apple o Google.
La reforma se propone distribuir equitativamente entre países el derecho a gravar las ganancias de las multinacionales. Por ejemplo, una empresa como el gigante petrolero BP está presente en 85 países.
Apunta a las “100 empresas más rentables del mundo, que por sí solas realizan la mitad de las ganancias mundiales”, como los GAFA (Google, Amazon, Facebook, Apple), explicó Pascal Saint-Amans, director del Centro de política y administración fiscal de la OCDE.