Arde Haití un día antes del funeral de Jovenel Moise
CAP-HAITIEN. Las barricadas arderdieron ayer por toda la ciudad de Cap-Haitien, en el norte de Haití, a modo de protesta por el asesinato del presidente Jovenel Moise, en la víspera de su funeral.
Los manifestantes, que protestan para pedir justicia por la muerte de Moise, ocurrida el pasado 7 de julio, formaron barricadas por diversos puntos de la ciudad con piedras de gran tamaño y neumáticos ardiendo, que levantaban una gran humareda que era visible a un par de kilómetros de distancia del centro de la urbe.
Las personas de tez blanca eran señaladas, incluso perseguidas, por los participantes en la protesta, que identificaban el color de la piel con la nacionalidad colombiana, que compartían buena parte de los mercenarios que, según las autoridades, formaban el comando que mató a Moise.
Ya durante la misa en memoria de Moise celebrada por la mañana en la catedral, algunos grupos de personas se dedicaron a enardecer los ánimos, llamando a los presentes en el templo a salir a la calle a protestar de forma violenta.
Está previsto que el funeral se celebre hoy, en la residencia de la familia de Moise, a las afueras de Cap-Haitien, aunque sus más acérrimos seguidores no quieren que se le de sepultura hasta que no estén muertos sus asesinos.
El miércoles hubo choques debido a la presencia en el lugar del director general de la policía nacional, Léon Charles.